Confirmado lo que va a subir las pensión de incapacidad permanente en 2025

• Blanca Espada @blank7133
• Redactora de contenidos en OkDiario. Escribiendo para blogs y empresas de contenidos digitales desde 2007.
• • 26/11/2024 08:15
  • Actualizado: 26/11/2024 08:15

Tal y como ocurriera este año 2024, cuando llegue el 2025 de nuevo se va a producir una revalorización de las pensiones contributivas, incluyendo las de incapacidad permanente. Estas prestaciones, esenciales para garantizar el bienestar de quienes han visto limitada o anulada su capacidad laboral, experimentarán una subida que, aunque moderada respecto a años anteriores, responde al compromiso del Gobierno de proteger el poder adquisitivo frente a la inflación.

La clave de este incremento en la pensión de incapacidad permanente radica en el Índice de Precios al Consumo (IPC) interanual, que sirve como referencia para actualizar las pensiones. Esta medida no sólo mantiene el nivel adquisitivo de los pensionistas, sino que también asegura una adaptación acorde con la evolución de los precios. Así, a partir del 1 de enero de 2025, las pensiones de incapacidad permanente y otras modalidades contributivas se ajustarán conforme a este indicador. A pesar de que el porcentaje definitivo depende de los datos de inflación hasta noviembre de 2024, las estimaciones actuales señalan un incremento cercano al 3%, similar al de este año. Este ajuste será especialmente relevante para aquellos que dependen de estas prestaciones como principal fuente de ingresos.

Esto es lo que va a subir la pensión de incapacidad permanente en 2025

El sistema de revalorización basado en el IPC tiene un objetivo claro: evitar que la inflación erosione el poder adquisitivo de las pensiones contributivas. Este método asegura que las prestaciones reflejen el costo real de la vida, ofreciendo estabilidad a los pensionistas. Para calcular la subida de 2025, se considerará el IPC medio interanual en las fechas que van de diciembre de 2023 hasta noviembre de 2024.

Teniendo esto en cuenta dentro del contexto económico actual, marcado por una moderación en los niveles de inflación en comparación con años anteriores, sugiere un aumento más contenido que el registrado en 2023 (3,8%) o 2022 (8,5%). Sin embargo, este ajuste sigue siendo significativo, garantizando que las pensiones no pierdan su capacidad de compra.

Además, el Gobierno ha implementado un plan estratégico a largo plazo para reducir la brecha entre las pensiones mínimas y el umbral de pobreza en 2027. Este esfuerzo incluye tanto las pensiones de incapacidad permanente como otras modalidades, con incrementos progresivos que buscan equiparar estas prestaciones a las necesidades básicas de los beneficiarios.

Factores clave que determinan la cuantía de la pensión de incapacidad permanente

Las pensiones de incapacidad permanente están diseñadas para compensar la pérdida de ingresos de quienes han sufrido lesiones o enfermedades que limitan o anulan su capacidad laboral. La cuantía de estas prestaciones depende de varios factores:

• El grado de incapacidad permanente reconocido: desde parcial hasta gran invalidez, cada nivel implica un porcentaje específico de la base reguladora.
• La base reguladora: esta se calcula a partir del salario previo al hecho causante, ajustándose al porcentaje aplicable según el grado de incapacidad.
• La revalorización anual: en función del IPC, el importe de la pensión se actualiza para mantener el poder adquisitivo.

En el caso de las pensiones derivadas de contingencias comunes, como enfermedad común o accidente no laboral, se abonan 14 pagas anuales, incluyendo dos extraordinarias. Por su parte, las pensiones derivadas de contingencias profesionales, como accidente de trabajo o enfermedad profesional, se distribuyen en 12 pagas, con las extras prorrateadas.

Subida prevista para las pensiones de incapacidad permanente en 2025

Según los datos provisionales del IPC ofrecidos por el Instituto Nacional de Estadística (INE), se espera que las pensiones de incapacidad permanente se revaloricen en torno al 3% para el próximo año. Esta cifra puede variar ligeramente dependiendo del dato de inflación final de noviembre de 2024, que será confirmado a finales de mes.

En términos prácticos, un incremento del 3% implicaría lo siguiente:

• Para una pensión actual de 12.000 euros anuales, la subida sería de unos 360 euros al año.
• En el caso de las pensiones mínimas, como las de gran invalidez, el aumento podría superar los 600 euros anuales.

Es importante destacar que, aunque el incremento es inferior al de años anteriores, sigue siendo una medida relevante para proteger el poder adquisitivo de los pensionistas frente a la inflación moderada.

Calendario del primer pago revalorizado

Aunque la subida será efectiva desde el 1 de enero de 2025, el primer abono ajustado se reflejará en las nóminas de finales de enero. Este retraso se debe a que las pensiones se pagan a mes vencido. Por lo general, los bancos adelantan el ingreso de las prestaciones entre el 23 y el 25 de cada mes, por lo que los beneficiarios podrán notar el incremento en esa fecha.

En conclusión, el incremento de las pensiones de incapacidad permanente en 2025 se va a volver a producir aunque la subida no será tan significativa como en años anteriores. Sin embargo, representa un paso más hacia la reducción de las desigualdades económicas y la garantía de un nivel de vida digno para los pensionistas. Además, este ajuste forma parte de un esfuerzo más amplio para equiparar las prestaciones mínimas al umbral de pobreza, asegurando que las personas que dependen de estas pensiones puedan cubrir sus necesidades básicas sin dificultades económicas.