Cada español paga 2.073 euros más de impuestos por el ‘no’ de Sánchez a ajustar el IRPF a la inflación

La negativa del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a deflactar los impuestos, es decir, a adaptarlos a la enorme subida de la inflación que ha sufrido España en los últimos años, ha provocado que los españoles tengan que pagar, de media, 2.073 euros más en tributos, según el último informe elaborado por el Instituto Juan de Mariana. El Ejecutivo socialista se ha negado en varias ocasiones a actualizar con el Índice de Precios al Consumo (IPC) algunos tributos como el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) pese a las solicitudes de la oposición.

En el estudio, el instituto refleja los muchos problemas generados a raíz de los altos niveles de inflación que ha vivido la economía española durante el Gobierno de Sánchez. Desde el mes en el que entró en el poder, el IPC «acumula un incremento del 21,3%».

Sin embargo, la subida de precios ha sido mucho mayor en alguno de los sectores clave: «En el caso de los alimentos, la subida observada asciende al 37,9%. Es la mayor escalada de los precios de las tres últimas décadas».

Además, si se compara con la gestión de otros ejecutivos, «el IPC acumulado bajo el Gobierno de Rajoy fue de 7,2 puntos porcentuales, lo que supone casi un 70% menos que durante el mandato de Sánchez». En ese sentido, el informe del IJM sentencia que «el ritmo de incremento de los precios se ha triplicado desde que el dirigente socialista ocupa la presidencia del Gobierno».

Si se excluye el impacto de los alimentos y de la energía, por ser estos productos cuyo precio es más volátil, la inflación subyacente «se ha incrementado un 18,8% bajo el Gobierno de Pedro Sánchez, frente a la subida del 7,5% acumulada durante la Administración Rajoy».

«En tasa anual, el IPC promedio del periodo de gestión de Rajoy asciende al 0,9%, mientras que el aumento apreciado desde que Sánchez es presidente es tres veces mayor, del 2,6%, llegando a registrar un pico del 7% en el dato del IPC para el ejercicio 2022», advierten los analistas.

De esta forma, la enorme subida de precios se ha visto reflejada en el modo de vida de los ciudadanos y no ha tenido efectos puramente nominales. Mientras los sueldos se han «revalorizado un 22,2%, su evolución una vez se ajustan los precios, arroja una mejora testimonial, de apenas un 2%».

«Lo que a priori son 6.013 euros de incremento salarial, son apenas 663 euros de mejora del poder adquisitivo, de modo que la inflación ha absorbido el 89% de la subida», asegura el documento. Es decir, la mejora económica de la que presume el Ejecutivo queda, en su mayor parte, absorbida por el menor valor de la moneda.

Subida de impuestos con la inflación

Es más, las decisiones relativas a la política fiscal del Ejecutivo socialista también han afectado de forma notable a los habitantes, pues el no a «deflactar el impuesto sobre la renta o las cotizaciones sociales para descontar el efecto de la inflación ha tenido un impacto significativo en el poder adquisitivo de los trabajadores». «A raíz de esta decisión del Gobierno español, el contribuyente promedio paga 2.073 euros más», aseguran los analistas.

De esta forma, los analistas analizan el IPC acumulado con Sánchez y se fijan «en el efecto de la progresividad en frío inducida por la no deflactación del IRPF». Tras ello, concluyen «que el trabajador medio ha perdido 1.410 euros de poder adquisitivo por estos dos motivos».

«Esto significa que el efecto directo de la inflación y la decisión de no indexar» los impuestos «sobre la renta ni las cotizaciones para descontar la subida de los precios han resultado en un impuesto del 123% sobre la mejora salarial que podrían haber obtenido los contribuyentes, en caso de que los precios se hubiesen mantenido estables y el IRPF hubiese sido actualizado según el IPC», sentencia el informe.