Asegura que no podía respirar

Marcelo desvela que sufrió un ataque de ansiedad antes de la final contra el Liverpool

Marcelo ha contado en 'The Players Tribune' que sufrió ataques de ansiedad en los momentos previos a la final de la Champions 2018. "No podía respirar. Intenté no entrar en pánico", cuenta.

Marcelo ha sido el último futbolista en pasar por The Players Tribune. El lateral del Real Madrid no pasa por su mejor momento y ha reconocido los problemas de ansiedad que tuvo durante la final de la Champions de 2018: «No podía respirar. Intenté no entrar en pánico. Fue en el vestuario justo antes de la final de Champions contra el Liverpool en 2018. No podía comer, no podía dormir».

«Cuando tienes la oportunidad de hacer historia, sientes esa carga. Pero por alguna razón, la estaba sintiendo de verdad. Nunca antes había sentido una ansiedad tan intensa, así que no sabía qué estaba pasando. Pensé en llamar al médico, pero me preocupaba que no me dejara jugar», cuenta el futbolista brasileño del conjunto madridista.

El lateral carioca era consciente de lo que se le venía encima, le tocaba bailar con la más fea. Mohamed Salah sería su pareja de baile durante la final. El egipcio venía en un gran momento de forma y no sería fácil de frenar. Pero una frase de un ex futbolista del Real Madrid que Marcelo sintió como una falta de respeto para intentar hundirle, tuvo el efecto contrario y le sirvió para motivarse. «Creo que Marcelo debería comprar un póster de Mohamed Salah, ponerlo en su pared y rezar por él todas las noches», afirmó el ex jugador.

Marcelo intentaba contener su ansiedad haciendo ejercicios para controlar la respiración, mientras se preguntaba: «¿Cuántos niños en el mundo juegan a la pelota? ¿Cuántos de ellos sueñan con jugar en una final de la Champions League?». «Cuando finalmente pisé el césped, todavía tenía problemas para respirar, y pensé: si tengo que morir aquí esta noche, joder. Moriré», añadió.

Los momentos previos al duelo fueron los peores para el lateral izquierdo. Sin embargo, justo antes de que el colegiado señalara el comienzo del encuentro, Marcelo volvió por sus fueros a tiempo para frenar a Salah en Kiev. «Nos alineamos para el saque inicial, bajo todas las luces, vi el balón de fútbol en el círculo central, y todo cambió. El peso se fue quitado de mi pecho. Estaba en paz».

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