Han pasado ya casi dos semanas desde el bochornoso episodio que vivió el Real Madrid y más concretamente Vinicius en Mestalla, donde se escucharon gritos racistas sobre el delantero blanco, situación que ha dado la vuelta al mundo y que ha puesto el punto de mira en España y en el racismo. El brasileño sigue recibiendo muestras de cariño tras lo sucedido, muy arropado por todos, también por un Carlos Henrique Casemiro que ha dado un aviso a España: cuidado con la fuga de Vini.
Casemiro desde la distancia y varios días después de lo sucedido habla sobre lo sucedido y suelta la bomba: entendería perfectamente que Vinicius deje el Real Madrid y España por lo vivido no sólo en Mestalla, sino en otros campos de La Liga esta temporada. Pese a que esta última ha terminado por dar la vuelta al mundo, durante esta campaña se han vivido casos similares que también recriminó el extremo.
La relación entre Casemiro y Vinicius es de amistad. El centrocampista fue como un hermano mayor para el extremo cuando aterrizó en el Real Madrid, le guió y le apoyó en su adaptación y es por eso que sus palabras cobran una importancia mayor, porque la comunicación entre ambos es fluida y no es baladí que el actual jugador del Manchester United suelte esas palabras a la ligera.
«Nos molesta que haya gente así todavía. No es la primera vez que Vinicius se queja, se queja mucho. Creo que LaLiga tiene que tomar medidas, porque no pueden perder a un jugador así», avisaba en un primer momento Casemiro en una entrevista concedida a TNTSports Brasil, en la que repasa su temporada con los Red Devils, que hoy se juegan el título de FA Cup ante el Manchester City.
Fue poco después algo más contundente Casemiro, que insistía en que no vería descabellado que a raíz de toda esta situación, su compatriota haga las maletas y se marche del Real Madrid y España: «Me alegro de que esté en el Real Madrid. Pero no me extrañaría que quisiera irse, que quisiera dedicarse a otras cosas».
Vinicius se ha sentido muy arropado por el madridismo desde que pasó todo esto. En el Santiago Bernabéu, tras el partido en Mestalla, el brasileño no jugó aquel encuentro por una inflamación en su rodilla y vivió el choque desde la grada junto a Florentino Pérez donde vio una gran pancarta en la que se podía leer ‘Vinicius somos todos’, camisetas de ánimo de la plantilla y una ovación atronadora de todo el estadio.