El Real Madrid cierra la Fonteta y ya es campeón de Liga tras arrasar al Valencia
El título es para los blancos, que alzan su segundo consecutivo en una temporada llena de récords
La Fonteta ya es pasado después de que los de Chus Mateo se impusiesen en un tercer cuarto letal
Así te hemos contado la conquista liguera del equipo blanco
El Real Madrid de baloncesto ya es campeón de la Liga Endesa por trigésimo octava vez en su historia tras aplastar al Valencia Basket por 70-81 en la final (3-0) y rematar la faena en un tercer partido en el que se sobrepuso a una auténtica olla a presión llamada Fuente de San Luis. La Fonteta ya es pasado después de que el equipo de Chus Mateo se impusiese en un tercer cuarto letal (9-21) en el que pudo hacer aún más daño a los taronja.
El título es para los blancos, que alzan su segundo consecutivo en una temporada llena de récords en ACB (39 victorias y 5 derrotas) en la que mantuvo su Movistar Arena inexpugnable e hizo de él su principal fortaleza. Los inicios no fueron nada fáciles, pero esta serie ante el Valencia dignifica el trabajo de un gran entrenador de baloncesto como es Chus Mateo y un grupo que alcanzó su nivel óptimo en estos play off. Pistoletazo a la ilusión para la 2025-26.
Bruno Fernando acabó siendo el nombre propio de la final, o el del tercer partido para ser justos con Mario Hezonja. El angoleño enchufó 13 puntos, pero sobre todo se convirtió en el pívot que la parroquia blanca demanda para dar respiros al gigante Walter Tavares (4 rebotes, 2 recuperaciones y 2 tapones para 21 de valoración). El croata, máximo anotador con 16 y 9 capturas para 19 en lo general.
El escenario era de vértigo para el Real Madrid. Ni un himno nuevo impidió a los 8.000 valencianistas darlo todo desde los instantes previos al partido, ni ese ambiente hostil impidió a los de Chus Mateo cuajar un gran arranque. Después de cinco minutos de tanteo (7-8), el líder de la Liga se destapó con Hezonja serio al rebote, Abalde machacando desde dentro y desde el perímetro y Facundo Campazzo, MVP de la final, generando el mayor juego posible.
El acierto acompañó a los blancos en el primer cuarto (8/13 en tiros de campo), no tanto a los de Pedro Martínez, muy precipitados al triple y topándose con el muro de Tavares (6/22), que dejó un taponazo sobre Soriano. La tensión se impuso en la Fonteta con la acción más polémica de la primera parte. Una falta de Llull sobre Montero que le dejó tumbado cerca de un minuto y que se resolvió con una revisión eterna y antideportiva y técnica para el balear.
Encestó las tres Montero y en la consecución parcial de 5-0 en segundos, pero Llull respondía con su primer mandarinazo para recuperar cierta ventaja (19-23). El Valencia echó de menos a Pradilla (0/6 en tiros de campo en la primera parte) y el Real Madrid encontró al mejor Fernando (9 puntos, 2 rebotes y 2 tapones), ese pívot por el que apostó en invierno para intentar olvidarse de Vincent Poirier y que nos ha acostumbrado a aparecer en los momentos indicados.
Pero los taronja se vinieron arriba con la entrada de los españoles Puerto, De Larrea y López-Arostegui y la Fonteta comenzaba a creérselo con un mate en solitario de Soriano que ajustaba a más no poder el encuentro (34-36). Y al igual que en el primer parcial, el choque se paraba de nuevo al pedir el Valencia antideportiva de Hezonja sobre XLA. Se pitó falta normal, pero el de la selección española tenía una guardada: triplazo para poner por delante a los suyos al descanso sobre la bocina (40-39). Abalde contrarrestaba antes dos libres de Montero para colocarse como máximo anotador provisional del Real Madrid (9 puntos).
Contraataque total de los blancos en la reanudación, con parcial de 0-15 y pausa obligatoria de Pedro Martínez. No fue la mejor defensa del Real Madrid, pero sí la más efectiva ante otro ataque de nervios del Valencia y a partir del arreón fue el turno para Tavares, que se olvidó de la primera mitad y contuvo al cuadro local en defensa. Aunque se empeñaron los blancos en mantener viva la final sin hacer demasiada sangre desde ese duro parcial.
El duelo se calentó con una protesta de la Fonteta que ponía fin al tercer cuarto (49-60). El Real Madrid lo tenía en su mano, pero la ventaja pudo ser mayor de no ser porque Abalde perdonó un tiro de tres abierto tras fintar a Jones y otra canasta sobre la bocina. Y es que fueron 8 las pérdidas del Valencia en el tercer parcial, letal por parte de los de Chus Mateo (9-21) y que bien valía un título.
Cara totalmente opuesta del Real Madrid en el último cuarto, pero ni por esas le dio al Valencia. Badio llegó tarde a la final, Pradilla ya ni contaba y eran Jones, Reuvers, Soriano y por supuesto Montero quienes evitaron un final más aciago.