Pole de récord para Maverick Viñales con otra caída de Márquez, que saldrá antepenúltimo

De penúltimo a primero. Maverick Viñales ha batido a Fabio Quartararo para lograr una pole de récord en el GP de Holanda de MotoGP. El piloto de Figueres ha cambiado la cara radicalmente. Lo necesitaba. Después de salir penúltimo en Alemania y quedar 19 en carrera, Mack se ha rehecho de la mejor manera posible para volver a sonreír. No hacía la pole desde el GP de Emilia Romaña en 2020.

Desde el inicio se vio que la pelea iba a estar entre las dos Yamaha. Rápidamente, Quartararo, ponía las cosas difíciles a su compañero de equipo con un tiempo de 1:31.9 minutos, que suponía el récord de la pista. Pero Maverick tenía algo guardado y a dos minutos para el final hizo lo que parecía imposible. Mejoró el tiempo del francés y paró el crono en 1:31.8 minutos. Pese a los intentos del líder del Mundial por recuperar el trono no pudo ser. Se quedó a milésimas de conseguirlo pero finalmente fue Viñales quien se impuso en la pelea por la pole en Assen.

En primera fila, junto a las dos Yamaha, estará Pecco Baganaia. El italiano se coló a última hora en la tercera posición de la parrilla y echaba a la Honda de Nakagami de esa posición de privilegio. Respecto a las Suzuki, Alex Rins fue el mejor clasificado (séptimo) mientras su compañero, Joan Mir, saldrá décimo. Por detrás del vigente campeón de MotoGP quedaron Pol Espargaró (undécimo) y Valentino Rossi (duodécimo).

Márquez, al suelo

Marc Márquez, no pudo pasar de la Q1 y saldrá vigésimo. El piloto de Cervera ya predijo tras ganar en Sachsenring que iba a sufrir en Assen. Después de colarse en la última vuelta lanzada de los entrenamientos libres tres cuando venía en tiempo para meterse entre los 10 primeros, y evitar la Q1, sufrió una caída al final de la Q1. Probablemente el ilerdense no se habría metido en la Q2 pero venía mejorando su tiempo cuando se fue al suelo por segunda vez este fin de semana.

Johann Zarco y Pecco Bagnaia fueron los dos pilotos que pasaron a la lucha por la pole procedentes de la Q1. El francés se metió in extremis en su última vuelta lanzada. Sorprendió a todos y echó a Iker Lecuona, que se quedó fuera por 67 milésimas. Bagnaia acompañó al piloto del Pramac Ducati después de liderar prácticamente toda la Q1, aunque al final pasó como segundo.