Griezmann activa el ‘modo remontada’

El Barcelona se llevó tres puntos importantísimos al imponerse por 1-2 al Villarreal en un choque muy disputado y en el que Antoine Griezmann, con un doblete, fue el héroe al remontar el tanto inicial de Chukwueze. Victoria vital para los de Ronald Koeman, que meten presión al Atlético y hacen pensar, gracias a esa inercia que llevan en 2021, que tienen grandes papeletas para levantar el título de la Liga Santander. 

Después de la cómoda victoria del Barça ante el Getafe, sin prácticamente tiempo, los hombres de Ronald Koeman se presentaban en Castellón para jugar ante el Villarreal, un equipo siempre potente que quiere amargar esta Superliga a los azulgranas. Y es que el cuadro culé se presentaba en el Estadio de la Cerámica sabiendo que el Real Madrid había pinchado ante el Betis y tenía una oportunidad de oro para alejarles, aunque bien es cierto que tienen un partido menos que jugarán ante el Granada el próximo jueves.

Sin grandes novedades se vistió de gala el equipo culé. Ronald Koeman sólo hacía un cambio respecto a su último once, y ese era la suplencia de Sergi Roberto por la titularidad de Sergiño Dest. Junto al ex del Ajax, en la defensa, formaban Mingueza, Piqué, Lenglet y Jordi Alba. Por detrás, obviamente, estaba Ter Stegen. En la medular, los de siempre, los fijos: Busquets, De Jong y Pedri. Messi y Griezmann partían como hombres más adelantados.

Rodó el balón en el estadio del Villarreal y el Submarino salió más enchufado en los primeros minutos. Tanto, que de un córner estuvo a punto de llegar el primero, pero el remate de Gerard Moreno, ante la atenta mirada de Lenglet, se marchaba por encima del travesaño. Presionaban bien arriba los de Unai Emery, el Barcelona no era capaz de salir y, ante esa situación, se recurrió a algo que va en contra de la filosofía Barça: el pelotazo. Gracias a un balonazo llegó la primera de los azulgranas: dejadita de De Jong y Albiol, que mete la rodilla para negarle el gol a Antoine Griezmann.

Comenzaba a avisar un Griezmann que aún no sabía que se convertiría en el protagonista de la tarde. Con el paso de los minutos el Barcelona se iba sintiendo más cómodo y jugaba más cerca del área de Asenjo. El guardameta del Villarreal tuvo que esmerarse para detener sobre la línea un disparo a bocajarro de De Jong que se había iniciado con una jugada propia de museo en la que participaron Dest, Messi, Grizzi y Jordi Alba. Una parada parecida a la mítica de Casillas a Perotti, pero cierto es que el disparo del holandés fue muy centrado.

Griezmann llega a tiempo

Messi probó fortuna, pero de nuevo estaba Asenjo, que comenzaba a convertirse en la figura del Villarreal. Pero cuando más llegaba el Barcelona, mazazo para los de Ronald Koemann. Pau Torres se sacó un pase perfecto para Chukwueze, que arrancó desde la derecha para acabar regateando a Ter Stegen por la zona opuesta del campo y definiendo. Bailecito en su celebración y alarma en el bando culé, que con tres centrales, el nigeriano fue capaz de ganarles la espaldas y arrancar en un costado y finalizar en el contrario.

La sonrisa le duró poco al combinado local, que vio como Antoine Griezmann igualaba la contienda nada más sacar. Ahora fue Mingueza el que dio un pase en largo al francés, que se plantó ante Asenjo para picarle el balón y devolver la igualada al marcador. El segundo de la tarde para el de Macon llegó minutos después, gracias a una cagada monumental de Foyth. El defensa argentino se la quiso ceder a su portero, pero no se había dado cuenta de que el ex del Atlético estaba por ahí. El galo cogió el balón y sólo tuvo que definir en el mano a mano con Asenjo.

Al borde del descanso Griezmann rozó el hat-trick, pero esta vez el vencedor del duelo fue el guardamenta palentino. Con el 1-2 que podía haber sido más abultado se marcharon al descanso. A la vuelta de vestuarios entró Sergi Roberto, que cumplía 300 partidos, para ocupar el puesto de Sergiño Dest. Volvió a salir mejor el Villarreal al terreno de juego, gracias, en gran parte, a la desaparición de jugadores tan necesarios en el Barcelona como son Messi o Pedri. De hecho, el argentino disfrutó una buena ocasión, pero su disparo, con la pierna derecha, se fue a las nubes.

Unai Emery también movía el banquillo. Quitaba a Alberto Moreno y Paco Alcácer, prácticamente invisible ante su ex equipo, y metía más velocidad con Estupiñán y más fuerza con Coquelin. Pero el que seguía trayendo loca a la defensa culé era Samu Chukwueze. El nigeriano inició una jugada, en la que dejó sentado a Pedri, que Capoue no fue capaz de finalizar. Sufrían los azulgranas y Ronald Koeman decidía quitar al centrocampista canario para darle entrada a Ilaix Moriba.

Trigueros condiciona el partido

En el 64′ llegó la polémica. Una dura entrada de Manu Trigueros sobre Leo Messi acabó con roja directa para el centrocampista del Submarino. El ’14’ llegó antes y tocó el balón, pero en la inercia golpeó muy fuerte con los tacos en la tibia del pie que tenía apoyado el argentino. Ni con uno menos se rindió el Villarreal, pero la inferioridad numérica se notaba. Ilaix Moriba pudo sentenciar, pero como en el Di Stéfano, su disparo se marchó por encima del larguero rival.

No marcar implicaba sufrir y si Chukwueze agarraba el balón cualquier culé se ponía a temblar. Y si después se la daba a uno de los mejores delantero de España, Gerard Moreno, más aún. El ex del Espanyol mandó un balón fuera rozando el poste, advirtiendo que los 10 últimos minutos iban a ser muy disputados. Para tratar de matar el encuentro en un contragolpe entró Dembélé y se marchó Griezmann, aunque el problema era que el ex del Dortmund estaba muy solo arriba… y en la que le acompañaron De Jong no fue capaz de mandar su vaselina entre los tres palos.

Se entró en la recta final del partido y el Barcelona quería asegurarse la victoria. Para ello Ronald Koeman metió a Araújo sustituyendo a Busquets. Cinco minutos cayeron de añadido, y cinco minutos en los que no se movió el marcador. Se sumaron tres puntos al casillero del Barça, que gracias a los dos goles de Griezmann, que le dieron la vuelta al electrónico, inician ese ‘modo remontada’ en el que pretenden superar al Atlético y acabar cantando el alirón al término del curso.