Cristiano, aquí empezó todo

Cristiano Ronaldo vuelve a Mendozorroza para poner fin a la mala racha del conjunto madridista en Liga. Los blancos vienen de ganar uno de los últimos cuatro encuentros. Sólo cinco puntos de los últimos 12, y dejándose todos los puntos únicamente en casa. Sin embargo, los de Zidane llegan a Vitoria con un brutal registro como visitantes: han ganado los últimos 11 encuentros que han disputado fuera de su estadio.

Confían, por tanto, en lograr la victoria frente a un Alavés que aún no ha puntuado esta campaña. Y piensan hacerlo con un Cristiano que el curso pasado ya dejó muestras de lo que es capaz de hacer en el feudo babizorro. El conjunto vitoriano cuenta todos sus encuentros como derrota. Nada que ver con el equipo que la pasada temporada hizo honor a su seudónimo de ‘Glorioso’, que fue la revelación de Primera y logró alcanzar la final de Copa.

Aquel equipo, dirigido entonces por Pellegrino, encajó una incontestable derrota contra el que, a la postre, sería campeón del campeonato. El conjunto madridista, liderado por su estrella, le hizo cuatro goles a los blanquiazules. Tres de ellos fueron de Cristiano.

El portugués dio un golpe de autoridad en el estadio alavesista, en un momento en el que se le empezaba a cuestionar por parte de la hinchada madridista. Entonces, CR7 llevaba tan sólo dos goles en Liga, siendo la jornada 10 y su juego, tras la lesión que le tuvo apartado en el inicio de la competición, no convencía. Sin embargo, en Mendizorroza apagó el fuego. Hizo un hat-trick para sellar una victoria de los madridistas por 1-4.

El sábado los blancos necesitarán más que nunca la victoria. Su hándicap de siete puntos respecto al Barcelona en la clasificación podría verse incrementado de no lograr los tres puntos. La situación, en estos momentos, se presenta complicada en Chamartín de cara a revalidar el título. Cierto es que aún queda mucho por delante, pero los blancos no pueden ceder más si quieren lograrlo.

Para ello tienen a Cristiano. Si hay alguien que sabe adaptarse a las situaciones complicadas es él. Además que ya mostró ante el Betis su afán por marcar, aunque sin suerte. Pese a la sanción, ha enseñado una determinación increíble en este inicio de campeonato. Una efectividad que, sin embargo, se olvidó frente a los verdiblancos y que espera recuperar ante el Alavés. Y será en un territorio que ya conquistó el pasado año. En un Mendizorroza que era entonces un fortín hasta que apareció CR7 para tumbar el muro de Pacheco.