El motivo por el que no es recomendable hacer la cama por las mañanas

Hacer la cama por la mañana es una práctica profundamente arraigada en la mayoría de las personas desde la infancia, considerada parte de una secuencia «correcta» para iniciar el día. Expertos en bienestar respaldan esta rutina, argumentando que hacer la cama contribuye a sentirse más productivo, tranquilo y preparado para el día. Sin embargo, un grupo de investigadores ha sugerido que esta práctica matutina podría ser perjudicial para la salud.

El Dr. Karan Raj, del Servicio Nacional de Salud del Reino Unido, ha ganado popularidad por sus videos que abordan mitos y realidades sobre la salud. En uno de sus videos, el doctor explica por qué hacer la cama nada más levantarse no está relacionado con desorden o falta de tiempo, sino con la salud. Argumenta que hacer la cama atrapa los ácaros del polvo que se han acumulado durante la noche. Estos microscópicos organismos, que se alimentan de escamas de piel humana y proliferan en entornos húmedos, podrían verse afectados por este hábito matutino.

«Cuando dormimos por la noche, nuestros cuerpos se calientan y sudan, lo que los convierte en los principales objetivos para que estos ácaros se alimenten. Dejarán tras de sí excreciones que pueden provocarnos asma o síntomas parecidos a los de una alergia. Así que tender la cama por la mañana atrapa toda esta humedad y proporciona un hogar para 1,5 millones de estos chicos malos», dice el experto, agregando que «en lugar de eso, deja tu cama desordenada solo por un tiempo. Esto expone estos ácaros al aire y la luz solar, lo que los deshidrata y hace que mueran», detalla, según recoge ‘Uppers’.

¿Por qué no debes hacer la cama por la mañana?

Un estudio realizado por la Universidad de Kingston, Inglaterra, después de seguir camas durante dos años, concluyó que alrededor de 1,5 millones de ácaros pueden habitar en una cama. Este estudio sugiere que dejar la cama deshecha puede dificultar la supervivencia de los ácaros, ya que las condiciones cálidas y secas de las sábanas abiertas podrían provocar su muerte más rápidamente en comparación con una cama que se hace inmediatamente después de levantarse.

Para contrarrestar este efecto negativo, se recomienda ventilar la habitación durante 10-15 minutos antes de hacer la cama, por ejemplo, mientras se desayuna. Esto ayuda a eliminar la humedad acumulada durante la noche debido al sudor y la falta de ventilación. Según el estudio, hacer la cama de inmediato después de levantarse puede atrapar esa humedad en las sábanas, lo que favorece la proliferación de ácaros. Ventilar la habitación antes de hacer la cama ayuda a reducir esta humedad y a crear un entorno menos propicio para estos microorganismos.

Lindsey Ellefson, periodista de ‘Life Hacker’, recomienda esperar alrededor de una hora después de levantare antes de hacer la cama, a pesar de las sugerencias de los libros de autoayuda que promueven la disciplina y la productividad. Ella destaca una serie de estudios que respaldan la idea de no hacer la cama inmediatamente al levantarse. Aunque hacer la cama puede ayudar a mantener la mente ordenada para enfrentar el día, sugiere que lo más adecuado y saludable sería hacerla algún tiempo después de levantarse y justo después de ventilar la habitación.

Por último, cabe señalar que lo habitual es cambiar las sábanas al menos una vez por semana, aunque esta frecuencia puede variar según la cantidad de suciedad y microorganismos acumulados. Lavando la ropa de cama a 60 grados centígrados, se garantiza la eliminación de la mayoría de bacterias y gérmenes. Es importante seguir las instrucciones de lavado indicadas en la etiqueta de las sábanas y considerar usar la temperatura más alta recomendada para una limpieza adecuada.