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El aviso más sorprendente de la OCU sobre la calefacción: nadie se esperaba esto

La opción más económica a lo largo del año es la bomba de calor

  • Janire Manzanas
  • Graduada en Marketing y experta en Marketing Digital. Redactora en OK Diario. Experta en curiosidades, mascotas, consumo y Lotería de Navidad.

Con la llegada del frío, es el momento de elegir un buen sistema de calefacción para el invierno, y para ello es esencial considerar tanto la eficiencia como el coste de los diferentes sistemas disponibles en el mercado; hay algunos que, aunque creemos que son más caros, pueden resultar más económicos a largo plazo. En este contexto, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha analizado el coste de diferentes sistemas de calefacción, considerando no sólo el gasto energético, sino también el coste de instalación y el tiempo necesario para recuperar la inversión.

Este estudio de la OCU arroja luz sobre el gasto de calefacción en España. La organización estima que un hogar promedio gasta unos 640 euros anuales en calefacción, un gasto que supone un verdadero reto para familias numerosas o monoparentales. Así, la OCU detalla en su informe cuáles son los sistemas más asequibles y eficientes, ayudando a los consumidores a tomar decisiones informadas sobre qué opción puede adaptarse mejor a su presupuesto y necesidades de confort durante los meses más fríos del año.

El sistema de calefacción más económico según la OCU

El informe de la OCU revela datos sorprendentes sobre el coste de los distintos sistemas de calefacción, destacando que la opción más económica a lo largo del año es la bomba de calor. A pesar de que este sistema suele asociarse sólo con la refrigeración en verano, su eficiencia para la climatización durante el invierno lo convierte en la alternativa más asequible según el análisis de la organización.

La bomba de calor es un sistema de climatización que extrae energía térmica del ambiente exterior (ya sea aire, agua o suelo) para calentar o enfriar el interior de un espacio. Su funcionamiento se basa en un ciclo de compresión y expansión de un refrigerante que permite transferir el calor. Durante el invierno, absorbe el calor del exterior y lo transfiere al interior, y en verano, realiza el proceso inverso, funcionando como aire acondicionado.

Para llevar a cabo el estudio, la organización comparó varios sistemas de calefacción en un escenario de una vivienda de 90 metros cuadrados situada en una zona fría de España, como Madrid o Albacete. Los resultados mostraron que el aire acondicionado resulta ser una opción económica y accesible para quienes buscan calentar su hogar sin pagar demasiado en la factura. Sin embargo, el informe también aclara que, si se considera la inversión inicial y el tiempo necesario para amortizarla, existen otros sistemas con una relación coste-eficiencia más favorable a largo plazo.

Desde esta perspectiva, la calefacción por biomasa y la aerotermia se posicionan como las opciones más rentables. Ambos sistemas destacan no sólo por su eficiencia, sino también por su sostenibilidad. Las estufas y calderas de biomasa, por ejemplo, utilizan materiales orgánicos como restos de poda o huesos de aceituna, ofreciendo una alternativa respetuosa con el medio ambiente. Este tipo de calefacción funciona distribuyendo aire caliente mediante estufas, o calentando agua para utilizarla en radiadores o suelo radiante en el caso de las calderas.

Según la OCU, el coste inicial de una instalación de biomasa o aerotermia ronda los 1.650 euros, mientras que el gasto anual medio de estos sistemas es de aproximadamente 393 euros. Esta combinación de coste asequible y sostenibilidad convierte a estos sistemas en una inversión rentable tanto para el presupuesto familiar como para el entorno.

Comparativa

El coste anual de calentar una vivienda de 90 metros cuadrados puede variar significativamente, dependiendo del sistema de calefacción utilizado, su coste de instalación y el tiempo necesario para amortizar la inversión inicial en comparación con sistemas menos eficientes.

La caldera de gasóleo, con un gasto anual en energía de aproximadamente 778 euros, tiene un coste de instalación de 2.200 euros. Sin embargo, aunque es un sistema popular en zoas rurales, no destaca por su eficiencia y su amortización frente a otros sistemas más rentables es limitada.

Por otro lado, los sistemas eléctricos presentan diferentes opciones. Los radiadores eléctricos, con un gasto de energía de 640 euros anuales y una instalación de 2.500 euros, tienen un tiempo de amortización de hasta 18 años. Los acumuladores eléctricos son algo más rentables, con un consumo anual de 512 euros y un coste de instalación de 2.600 euros, lo que reduce la amortización a 10 años.

Entre las opciones más eficientes, la estufa de pellets ofrece un consumo anual de 393 euros y una inversión de 1.650 euros. Su amortización es relativamente rápida, de sólo cuatro años, y además es una alternativa sostenible gracias a su uso de biomasa.

Dentro de los sistemas de bomba de calor, hay dos opciones: la aerotermia (bomba de calor aire-agua), que es muy eficiente, con un gasto anual de 229 euros. Sin embargo, su instalación es costosa, alcanzando los 9.700 euros, lo que implica una amortización de 18 años. En cambio, el aire acondicionado (bomba de calor aire-aire) resulta más accesible y económico, con un gasto anual de 158 euros y una inversión de 2.640 euros, alcanzando su amortización en cuatro años.