Colau pasa de Belarra y Montero: buzonea Barcelona con una foto suya y de Yolanda Díaz

«Yolanda Díaz y Ada Colau comparten el proyecto de construir una economía más justa, plural y sostenible. Por eso impulsan políticas que crean puestos de trabajo dignos, protegen a la gente, cuidan al pequeño comercio y recuperan la industria local. Para que la economía genere prosperidad para todos, no sólo para unos pocos». Esta es la carta de presentación, junto a un gráfico sobre el aumento del salario mínimo interprofesional, con la que Colau se presenta en Barcelona como la embajadora del nuevo proyecto de Díaz. Este fin de semana, tras el éxito del acto que celebraron ambas en Valencia, la alcaldesa ha llenado los buzones de Barcelona de trípticos a todo color con su foto y la de la vicepresidenta, a la que este fin de semana la llamaba «líder mundial». Ni rastro de Podemos, ni de Ione Belarra ni de Irene Montero.

El papel publicitario, con el logo de su partido muy pequeño y en una esquina, saca pecho de las distintas medidas que Ada Colau ha impulsado en el Ayuntamiento barcelonés y Yolanda Díaz en el Gobierno. De la labor de la alcaldesa destaca la implementación de las superilles que tanta polémica han provocado, «la convocatoria de la mayor oferta pública de la historia de Barcelona», un servicio de canguros municipales gratuitos para familias monoparentales, el «récord en la construcción de pisos públicos», las ayudas para la rehabilitación energética o la reactivación de barrios como el Besòs. Del día a día del Gobierno destaca la política de ERTE o el aumento del salario mínimo interprofesional, ambas medidas impulsadas por Díaz. No hace mención alguna a la Ley de Igualdad, que abanderó Irene Montero, ni a la de la Infancia, de Pablo Iglesias o a la de Vivienda, que depende en buena manera de Ione Belarra.

Ada Colau que, tal como avanzó OKDIARIO, ya pliega velas de la política municipal, consciente de que no va a conseguir revalidar un tercer mandato, se ha desvinculado ya prácticamente por completo de Podemos y poco a poco lo irá haciendo también de su propio proyecto, Barcelona en Comú. Su intención es ser la mujer de Díaz en Barcelona. Su mano derecha. Su candidata en las próximas elecciones generales, previstas para 2023. El calendario a día de hoy le permitiría acabar el mandato municipal y presentarse posteriormente como número uno por Barcelona. Pero fuentes de su entorno no descartan, si Pedro Sánchez acaba adelantando los comicios, que la activista acabe dimitiendo como edil para centrarse en la política nacional. En BComú ya piensan en un relevo que, a día de hoy, coge al partido completamente dividido y sin un liderazgo claro más allá del de la propia Colau.