COLEGIO DE LA SALLE

La socialista Armengol se solidariza con la profesora del La Salle que llamó «trapo» a la bandera española

Francina Armengol
Francina Armengol.

La presidenta del Govern balear, Francina Armengol, ha considerado «intolerable» las amenazas a la profesora de La Salle Palma, que pidió a un grupo de alumnos de primero de bachillerato, que habían colgado una bandera de España en apoyo a la selección española de fútbol por su participación en el Mundial en el aula, su retirada. Previamente, esta profesora había tachado de «trapo» a la bandera española tras negarse a dar clase hasta que no la retirasen. La socialista ha culpado a los niños expulsados del colegio de ser «la ultraderecha». Armengol gobierna con el apoyo de Més per Mallorca, que ha exigido un referéndum para 2030.

Según ha expresado la presidenta Armengol en un mensaje publicado en redes sociales «los centros son los que marcan las reglas de convivencia en las aulas». Además, ha añadido, «los docentes han de ser respetados, y su tarea, protegida». «Es intolerable», ha incidido la dirigente autonómica, «que se les ataque y amenace».

Lo más sorprendente del mensaje de Armengol es que la socialista considera «ultraderecha» a los niños y padres que quisieron apoyar a la selección colgando una bandera de España en el aula. «Todo nuestro apoyo a la profesora de La Salle Palma amenazada por la ultraderecha», ha finalizado su mensaje en redes sociales la presidenta del Govern.  Hay que recordar que la presidenta socialista de Baleares de joven militó en la organización independentista Bloc d’Estudiants Independentistes (BEI), cuando realizaba la carrera de Farmacia en Barcelona.

Los socios independentistas de Armengol de MÉS per Mallorca han expresado su apoyo al claustro educativo de La Salle y a la profesora. «Las aulas han de ser espacios estrictamente docentes donde se puede producir y, además, se ha motivar el debate, aunque siempre con criterios pedagógicos», afirmó Lluis Apesteguia.

También Podemos, después de conocerse que la docente habría sido amenazada, manifestó toda su solidaridad con ella y la dirección del centro. «Esto no va de banderas, va de impedir que acaben con nuestra concordia y nuestra Democracia», enfatizó la formación chavista.

La decisión de la dirección técnica de La Salle fue criticada por el progenitor de uno de los alumnos, quien censuró a través de redes sociales que su hijo -y su clase- había sido «expulsado» por poner la bandera de España en el aula porque «disfruta del Mundial con alegría y pasión». Este padre afirmaba, además, que los alumnos «antes de poner la bandera pidieron permiso a su tutor y éste se lo concedió».

Por ello, añadía el progenitor «obviamente» estos hechos «se ponen en manos de inspección educativa», al creer que «aparte de tratar de ensuciar un gesto espontáneo y deportivo, profesores y colegio La Salle Palma ha incumplido los protocolos al enviar a menores a casa sin comunicarlo a los padres».

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