El PSOE de Zaragoza es el que más mociones de reprobación presenta pero mantiene al edil de la ‘trama Cerdán’

El caso del concejal socialista Alfonso Gómez Gámez ha abierto un profundo debate en el seno del Ayuntamiento, dado que el PSOE todavía lo mantiene como portavoz adjunto y no tiene intención, según han expresado, de destituirlo por el momento, pese a que las conversaciones grabadas por Koldo García señalan al concejal como uno de los implicados presuntamente en el cobro de mordidas cuando era director general de Minas en Aragón.

Mientras, los socialistas del grupo municipal de Zaragoza son los que más mociones de reprobación o dimisión presentan contra ediles del PP o de Vox reivindicando «valores éticos» en democracia.

Si en un primer momento, cuando salió publicada en los medios de comunicación la información, el PSOE dio rápidamente una rueda de prensa para anunciar que suspendían de militancia al concejal, a los pocos días los socialistas han dado un paso atrás en su «actuar con contundencia».

El pasado martes, la portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Zaragoza, Lola Ranera, afirmó que el PSOE actuará cuando el expediente abierto esclarezca su implicación en el caso. Esto podría llevar incluso más de un año, si nos atenemos a lo que ha sucedido con el ex ministro de Transportes, José Luis Ábalos, a quien se le suspendió de militancia en febrero de 2024, y fue precisamente también el pasado martes cuando la Ejecutiva del partido anunció su expulsión.

Pese a ello, los socialistas sostienen que el PSOE ha demostrado «ejemplaridad» frente a la corrupción y aprovecharon para criticar al PP de «actuar con hipocresía».

Los populares ya han presentado una declaración institucional contra la corrupción y han exigido que aclaren la situación de Gómez Gámez, expresando su decepción por «no adoptar medidas más contundentes». Consideran que los socialistas están «estafando a la opinión pública» al mandar mensajes «equívocos».

Por su parte, Vox tacha la actitud del PSOE de «maquillaje político» y consideran que mantener a Gómez Gámez en su puesto evidencia «miedo» a que puedan «salir más datos comprometedores».

El PSOE ataca a los demás

La posición del PSOE en este asunto llama la atención teniendo en cuenta que ha sido el partido que más mociones de reprobación y dimisión llevan presentadas desde que comenzó la legislatura, mientras mantienen al edil de la trama Cerdán, como apunta el líder de Vox en el Ayuntamiento de Zaragoza, Julio Calvo a OKDIARIO.

Según explica el portavoz del grupo Popular en el Ayuntamiento, Ángel Lorén, a este medio, «los socialistas están trazando la estrategia del tú más», pero advierte que «la corrupción del PSOE explotó con Luis Roldán en Zaragoza, y años después ha vuelto con fuerza».

En estos últimos meses, el PSOE ha perseguido con ahínco a todos aquellos que han criticado al líder de su partido y presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, sobre todo desde que Pilar Alegría se hizo con la Secretaría General del PSOE en Aragón y la portavoz municipal, Lola Ranera, decidió abandonar políticamente las filas del ex presidente, Javier Lambán.

La última moción de reprobación presentada por el PSOE fue contra la actual directora de Comercio, Ferias y Artesanía, Carmen Herrarte, a quien tanto el PSOE de las Cortes de Aragón como el del Ayuntamiento zaragozano pidieron la dimisión y exigieron a Jorge Azcón que la destituya por haber denunciado en redes sociales el escándalo del Parador de Teruel.

Además, pidieron la reprobación del consejero municipal de Economía, Carlos Gimeno, por considerar que tanto Herrarte –en su época de consejera– como él habían realizado «mala gestión» en el Plan Local de Equipamientos Comerciales.

Otra moción que evidencia cómo el PSOE está tratando de perseguir cualquier crítica a Sánchez fue la que promovieron para reprobar al portavoz de Vox, Julio Calvo, por llamar «sinvergüenza» al presidente Sánchez, y también para la alcaldesa Natalia Chueca por considerarla «cómplice».

Además, en septiembre de 2024, los socialistas pidieron la dimisión de la concejal del Mayor, Paloma Espinosa, por considerar que había facilitado datos personales para la apertura de un comedor.

Y, por poner dos ejemplos más, a finales de 2023 los socialistas también pidieron la reprobación de la concejal de Movilidad, Tatiana Gaudes, que no salió adelante gracias a los apoyos de Vox, por un error en las ayudas del autobús. Así como la dimisión del consejero de Urbanismo, Víctor Serrano, por el estadio de la Nueva Romareda por considerarlo «una chapuza» jurídica.

Sin embargo, cuando el escándalo ha golpeado en la línea de flotación del PSOE en Zaragoza los socialistas piden cautela. De hecho, la propia Pilar Alegría este martes reconoció que no sabía «si podían aparecer más nombres» que comprometan al PSOE. Pese a ello, insistió que «frente a cualquier indicio sólido que afecta a cualquier persona» actuarán con «la misma contundencia». Alfonso Gómez Gámez sigue manteniendo su cargo.