Memoria Histórica

PSOE y Podemos rechazan que Calvo explique el derribo de la Cruz de Aguilar con la Ley de Memoria

La Mesa del Cámara inadmite la iniciativa de Vox que contó también con el apoyo de los populares

Vox defiende que la "protección del patrimonio artístico nacional no es exclusiva de ayuntamientos o comunidades"

La alcaldesa comunista de Aguilar votó hace 40 años que la cruz demolida recordaba a todas las víctimas

Cruz aguilar
La Cruz de las Descalzas de Aguilar de la Frontera en una camioneta tras ser derribada.
Segundo Sanz

La Mesa del Congreso de los Diputados, con la mayoría de los votos de PSOE y Podemos, ha rechazado la comparecencia de la vicepresidenta primera del Gobierno, la socialista Carmen Calvo, solicitada por Vox para dar explicaciones sobre la polémica aplicación de la Ley de Memoria Histórica, competencia de su cartera, en la controvertida retirada de la Cruz de las Descalzas en Aguilar de la Frontera (Córdoba). Un derribo decretado por la alcaldesa, Carmen Flores, de Izquierda Unida.

Según ha explicado Vox, formación representada en la Mesa de la Cámara través del vicepresidente cuarto, Ignacio Gil Lázaro, PSOE y Podemos, acogiéndose al criterio no vinculante de los letrados del Congreso, ha rechazado la calificación de la comparecencia de la ministra de Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, que, sin embargo, sí ha sido apoyada por los diputados del PP. «Nos hemos opuesto al criterio de los letrados -que pedían que se reformulara por afectar a cuestiones que no son competencia del Gobierno-, señalando que la protección del patrimonio artístico nacional no es exclusiva de ayuntamientos o comunidades autónomas, sino también del Estado y la petición de VOX era, por tanto, pertinente», ha subrayado el partido de Santiago Abascal en una nota.

Si bien desde la Junta de Andalucía esgrimen que la retirada de la Cruz fue una «decisión política» de «competencia municipal», la alcaldesa fundamentó su derribo en la Ley de Memoria Histórica de Andalucía, aprobada a partir de la ley de 2007 del Gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero.

La petición de comparecencia fue anunciada la pasada semana por la portavoz adjunta de Vox en el Congreso, Macarena Olona, a través de las redes sociales. El partido de Abascal reclamó que Calvo acudiese a la Comisión Constitucional para explicar qué medidas que va a adoptar el Gobierno frente al derribo por orden municipal de la Cruz del Llanito de las Descalzas en Aguilar de la Frontera (Córdoba).

Además, Vox solicitó el expediente administrativo completo obrante en el ayuntamiento de esta localidad cordobesa conducente al derribo de la denominada Cruz de las Descalzas por orden de la alcaldesa de Izquierda Unida, Carmen Flores, el pasado 19 de enero.

Cambio de criterio

Esta regidora, que ya era concejal del Partido Comunista (PCE) en Aguilar a finales de 1979 tras las primeras elecciones democráticas, llegó a votar a favor a primeros de los 80 de la resignificación de la Cruz en recuerdo de todas las víctimas de la Guerra Civil y no sólo de los caídos del bando nacional, motivo inicial de su construcción en 1938.

Aquella votación del Ayuntamiento celebrada ya en Democracia, cuyas actas ha revelado OKDIARIO este lunes, hizo que en lugar de la lápida franquista de mármol se colocara otra placa más reducida como homenaje a todas las víctimas de la barbarie, sin distinción de bandos.

Sin embargo, ahora, y después de que esa placa fuera también retirada hace años, la alcaldesa comunista ha ordenado la demolición y destrucción de la Cruz en aplicación de la Ley de Memoria Histórica impulsada por el PSOE.  Todo en medio de un fuerte rechazo vecinal. Carmen Flores ha actuado 40 años después en contra de su propio criterio. Y la justificación ha sido una particular interpretación de la Ley de Memoria, que Vox ha exigido derogar a nivel autonómico y estatal.

Un concejal socialista

Según las actas de aquel Pleno del Ayuntamiento de Aguilar de la Frontera, consultadas por OKDIARIO, Carmen Flores votó a favor, al igual que el resto de la Corporación gobernada entonces por el PCE, de que la Cruz situada junto al Monasterio de San José y San Roque de las Carmelitas Descalzas rendiría el siguiente tributo: «En memoria de los caídos en la Guerra Civil española 1936-1939». Fue a iniciativa del concejal socialista José María Navarro León y salió aprobada con el consenso todas las fuerzas del Consistorio, integrado entonces por PCE, UCD, PSOE y PSA.

Las actas de aquel día lo recogieron así: «El Ilustre Ayuntamiento Pleno acuerda por unanimidad y en votación ordinaria manifestar su aprobación a lo expuesto por el señor Navarro León procediéndose a la sustitución de la mencionada lápida por otra portadora de la inscripción ‘En memoria de los caídos en la Guerra Civil española 1936-1939’». En aquella sesión votó a favor de dicha iniciativa y estuvo presente la actual alcaldesa que ha derribado la cruz, como acredita su firma en las actas de aquel Pleno del Ayuntamiento.

«Hoy conseguida la Democracia -prosiguió el concejal del PSOE-, y lo que es más, estando en el ánimo de todos el olvidar las penalidades y vicisitudes por las que pasó nuestra Nación en aquellos momentos y siendo además esto una realidad, puesto que hemos pasado de un régimen dictatorial a un régimen democrático sin trauma y con una aceptación claramente mayoritaria de todos los españoles, considero que la improcedencia de que se mantenga situada la lápida de referencia, pero al mismo tiempo estimo que el recuerdo de todos los que murieron en la Guerra Civil española debe perdurar, ya que en aquella contienda cada uno defendía los ideales de los que estaba poseído», subrayó Navarro León.

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