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El alto precio de los teléfonos es una razón de peso para asegurarlo. Los dispositivos de cada marca superan fácilmente los 1000 € de precio, lo que cuesta un ordenador portátil de buenas prestaciones. Por tanto, asegurar el móvil es una posibilidad que debe siempre valorar. Pero estas son las claves que han de servir de aliciente para que te decidas finalmente tener algunas coberturas previstas. Nunca sabes lo que puede llegar a pasar.
Asegurar el móvil, ¿cuándo?
La razón de peso para asegurar el móvil es principalmente obtener una compensación económica al móvil de reemplazo en caso de siniestro o de cualquiera de las circunstancias previstas en la póliza. Cuando compramos un teléfono móvil de alta gama y lo tenemos financiado a plazos, podría decirse que asegurarlo es prácticamente una obligación. En grandes ciudades es, desgraciadamente, bastante habitual el hurto Si tu teléfono no está protegido, deberás abonar todas las cuotas restantes, y cómprate otro teléfono. Se trata de el peor escenario posible.
Sin embargo, los precios de los seguros para un teléfono de gama alta no son nada descabellados. Desde 7 euros al mes encuentras pólizas bastante resolutivas y que contemplan muchas posibilidades diferentes. No todas cubren el delito de hurto, el más común, sino de robo. La diferencia entre uno y otro es que el segundo se produce con violencia. Por esa razón, siempre es interesante realizar una buena comparativa antes de contratar tu póliza.
Asegurar un móvil también es interesante sí, por tu actividad, tu móvil puede estar en peligro continuo. Es decir, desarrollas tu trabajo con cierto tipo de riesgo que puede hacer que el teléfono sufra caídas. Pensemos en el caso de monitores deportivos, empleados de servicios de limpieza o trabajos en altura. Comprueba previamente que seguro que vas a contratar tiene incluida también la rotura de pantalla y que la reparación se lleve a cabo por el servicio técnico oficial.
Generalmente, consultar nuestro seguro de hogar para comprobar si tenemos incluidos los dispositivos tecnológicos también es una buena idea. Si así es, evitarás tener que contratar un seguro específico.
Lo que no has de hacer
Hay quien piensa que asegurar el teléfono móvil es tener barra libre para actuar de manera incorrecta. Es decir, averiarlo deliberadamente para conseguir su equivalente en dinero o uno en mejores condiciones. También quien simula el robo, poniendo incluso una denuncia en comisaría, para poder cobrar la póliza. Es algo habitual entre los que tienen un teléfono de gama alta y no puede ser peor idea.
Estas denuncias siempre se investigan y acaban siempre muy mal para quien trata de estafar al seguro. Conviene tener en cuenta que hay cámaras de seguridad por todas partes y que los agentes de policía o guardia civil tratan habitualmente estos casos, y saben desbaratar cualquier tipo de coartada. Quizás saber que esto supone tener ya antecedentes penales sirva como barrera para que ni se te pase por la cabeza.
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