Una multitud de inmigrantes intenta asaltar una comisaría de Gerona tras una okupación frustrada

La okupación frustrada de un piso en Salt (Gerona) desembocó en escenas de vandalismo en la ciudad protagonizadas por los okupas e incluso el intento de asalto violento de la comisaría de los Mossos d’Esquadra por parte de decenas de inmigrantes y okupas. Los agentes tuvieron que llegar al cuerpo a cuerpo con los asaltantes que lanzaban piedras y huevos contra el recinto policial. Desde la comisaría tuvieron que pedir ayuda a los antidisturbios del ARRO para calmar los ánimos. Aún no hay detenidos y se analizan las cámaras de seguridad para identificar a los asaltantes.

Los hechos arrancaron pasadas las 18:00 horas del pasado lunes, cuando varios okupas de origen extranjero asaltaron una vivienda vacía propiedad de una entidad bancaria en Salt. Tras saltar la alarma, varias patrullas de los Mossos d’Esquadra se personaron en la vivienda y consiguieron frustrar la okupación expulsando a los tres okupas de origen subsahariano.

En ese punto se desató la violencia. Decenas de inmigrantes acudieron en auxilio de los okupas y comenzaron a agredir a los policías impidiéndoles salir del edificio que albergaba la vivienda objetivo de la okupación ilegal. En ese momento comenzaron las cargas policiales para dispersar a los violentos, según ElCaso.com.

Los incidentes, según fuentes policiales, se extendieron a varias partes de la ciudad pero la situación más grave se vivió en las puertas de la comisaría de los Mossos d’Esquadra. Allí, decenas de inmigrantes magrebíes y subsaharianos intentaron asaltar la comisaría, se enfrentaron con los agentes y lanzaron huevos y piedras contra los policías y el edificio. Los incidentes se saldaron con la intervención de los antidisturbios de los ARRO.

Otro asalto en 2023

No es el primer intento de asalto que sufre la comisaría de Salt. Ya en 2023 hubo tres detenidos, después de que decenas de personas de origen magrebí intentaran asaltar el edificio para liberar a un detenido acusado de falsificación.

El detenido envió varios mensajes alertando a  varios compañeros y dos de ellos llegaron a entrar en la comisaría para intentar liberarlo por la fuerza. Los tres fueron detenidos por delitos de atentado a la autoridad y desórdenes públicos.

Alertados por las detenciones, una veintena de amigos de los detenidos se congregaron en las puertas de la comisaría e intentaron entrar para liberar a los tres arrestados. Todo entre agresiones y amenazas a los policías que consiguieron desalojarles.