Dos padres crean la primera empresa biotecnológica para terapias innovadoras de niños con cáncer

La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que anualmente se diagnostican 400.000 nuevos casos de cáncer en niños y adolescentes de 0 a 19 años, en el mundo. Según los datos del Registro Español de Tumores Infantiles (RETI-SEHOP), en España, el cáncer infantil se sitúa como la primera causa de muerte infantil por enfermedad en niños mayores de cinco años y, cada año, se registran de 1.006 a 1.100 casos de cáncer en niños, de 0 a 14 años, y 400 casos en jóvenes mayores de 14 años.

A pesar de la reducción de la mortalidad del cáncer infantil, un número significativo de niños continúa falleciendo y muchos de los que sobreviven presentan toxicidades derivadas del tratamiento recibido, explican en un artículo de la revista ‘Pediatría Integral’ publicado por la Sociedad Española de Pediatría Extrahospitalaria y Atención Primaria (SEPEAP). Por ello, sus autores explican que hay una necesidad urgente de nuevos fármacos para niños con cáncer, «que permita eliminar la enfermedad refractaria y reducir las secuelas». 

Los cánceres infantiles son enfermedades consideradas raras debido a esta baja incidencia y la industria ha dedicado poca investigación al desarrollo de medicamentos contra el cáncer pediátrico específicosl, tal y como afirma el director general de Oncoheroes Biosciences, Ricardo García en declaraciones a OKSALUD. Se trata de la primera empresa biotecnológica dedicada exclusivamente al desarrollo de nuevas terapias para niños y adolescentes con cáncer, fundada por el propio Ricardo García y Cesare Spadoni, científico italiano, dos padres impactados por el cáncer infantil.

Padres implicados

En el año 2005, a la hija de Cesare Spadoni, Laura, le diagnosticaron cáncer en fase avanzada y después de varias rondas de dura quimioterapia y 3 cirugías, finalmente perdió su batalla contra el cáncer un año más tarde.

Ricardo García, explica que en 2011, a su hijo Richi le diagnosticaron un meduloblastoma de alto riesgo, uno de los tumores cerebrales infantiles más agresivos, un año después y tras mudarse a Boston, Richi terminó su tratamiento y ahora es un superviviente que ha soportado 25 cirugías, radiación y quimioterapia.

Poco después de que diagnosticaran a su hijo Richi, Ricardo descubrió que el cáncer infantil es una enfermedad huérfana con tan sólo 4 medicamentos aprobados en aquel momento específicamente para tratar esta condición. Se dio cuenta de que la industria farmacéutica no tenía ningún interés en oncología pediátrica porque es un mercado muy pequeño y no justifica su inversión y declara: «A pesar de los esfuerzos de la comunidad de cáncer infantil por financiar durante muchos años la investigación en cáncer infantil a nivel académico, los avances que se habían conseguido eran mínimos».

«Cesare y yo nos conocimos a través de otra madre con un hijo afectado por el cáncer infantil que había creado su propia fundación y junto con otras organizaciones sin ánimo de lucro, participaba en las conversaciones dónde yo estaba compartiendo mi visión de crear una compañía biotecnológica dedicada exclusivamente a oncología pediátrica. Esta madre me presentó a Cesare porque él llevaba tiempo abogando en la comunidad de cáncer infantil por una visión parecida y pensó que la combinación de ambos perfiles, el mío como emprendedor en serie y el de Cesare como científico con una dilatada experiencia en la industria farmaceútica, conseguiría convertir la visión en una realidad» relató Ricardo García a OKSALUD.

«Lamentablemente, una gran parte de los proyectos que podrían llegar a convertirse en nuevos fármacos mueren en el camino por falta de interés por parte de la industria, que resulta ser una pieza indispensable para aprobar nuevos fármacos». Así fue como decidió empezar a recaudar fondos para crear Oncoheroes Biosciences junto con Cesare para conseguir capital para la investigación de tratamientos pediátricos contra el cáncer. Juntos crearon la primera compañía del sector en todo del mundo dedicada 100% a desarrollar nuevos tratamientos para el cáncer infantil» , declara el director general de Oncoheroes.

«Aunque el mercado de oncología pediátrica (alrededor de 6.000 millones de euros) parezca pequeño frente al de adultos (unos 200.000 millones de euros), su magnitud y potencial impacto son más que convincentes. Invertir en oncología pediátrica no es solo una oportunidad económica, sino también un compromiso con el bienestar de las futuras generaciones y una causa que merece la atención y respaldo de todos», añade Ricardo García.

Debido a la insuficiencia de terapias específicas para niños con cáncer, los oncólogos pediátricos se ven obligados a ajustar los tratamientos del cáncer de adultos al cáncer infantil, tal y como explica el director general de Oncoheroes. Según sus datos, de los 120 medicamentos aprobados, alrededor de 30 se han utilizado sin autorización en niños, pero sólo 15 tienen información de uso pediátrico en su etiqueta. Además, la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA) sólo ha aprobado seis tratamientos diseñados específicamente para el cáncer pediátrico frente a los más de 200 aprobados para adultos. 

«Seguimos perdiendo a 250 niños en todo el mundo a causa del cáncer infantil, y muchos sobrevivientes, incluido mi hijo Richi, experimentan secuelas de por vida debido a la falta de tratamientos específicos, más eficaces y menos tóxicos. Es inaceptable. En Oncoheroes, trabajamos incansablemente para cambiar esta realidad», afirma Ricardo García. 

Objetivo: 1 millón de euros

En septiembre de 2023, Oncoheroes logró que la FDA autorizara el inicio de dos ensayos clínicos para comprobar la eficacia de dos de sus potenciales fármacos: Volasertib y Dovitinib. Para iniciar el ensayo clínico de Volasertib, la empresa acaba de anunciar una nueva campaña que consiste en la recaudación de 1 millón de euros en España para avanzar en el desarrollo de nuevos fármacos contra el cáncer infantil. 

Esta recaudación irá destinada en su totalidad a sufragar los costes del ensayo clínico y comprobar el potencial terapéutico de Volasertib en cinco tipos de cáncer pediátrico: sarcoma de Ewing; neuroblastoma; meduloblastoma; rabdomiosarcoma y glioma difuso de línea media (incluido el glioma difuso intrínseco de tronco). Este ensayo se llevará a cabo en diferentes centros de Europa, Reino Unido y Australia.

Para conseguir su objetivo de recaudar el millón de euros, Oncoheroes ha abierto dos vías: la primera, emitiendo más de 15 millones de acciones para que cualquier persona u organización, interesada en salvar vidas de niños con cáncer, pueda convertirse en socio de la compañía. Los interesados podrán adquirir acciones por €1,67 / acción, con un límite de compra mínimo de 1.000 euros, a través de la plataforma de inversión online de Capital Cell; la segunda, mediante donaciones directas en la plataforma de crowdfunding solidario ‘Mi grano de arena’ gestionadas por la Fundación Olivares, fundada por otro padre que perdió a su hijo de cáncer y que, en 2021, ya aportó financiación para el avance de Volasertib.