Así es el plan de Endesa para cuidar de la biodiversidad y minimizar el impacto ambiental de su actividad
La apuesta por la descarbonización de Endesa va de la mano del desarrollo de nueva capacidad renovable, y este recorrido va acompañado por un compromiso con las personas y con la biodiversidad que conviven con nuestras instalaciones. Endesa tiene ese compromiso desde hace más de 40 años y sigue manteniéndolo: cuidar de la biodiversidad, minimizar el impacto ambiental que provoca la actividad industrial con el objetivo de asegurar la sostenibilidad del planeta.
Endesa cuenta en España con más de 280 instalaciones renovables repartidas por toda la geografía. Estas plantas que producen energía limpia, desde hace un siglo en algunos casos, se han convertido también en un refugio para la biodiversidad.
Nuestro Plan de Conservación de la Biodiversidad nos permite integrar la protección de la biodiversidad y la mejora y mantenimiento del capital natural con el desarrollo de nuestra estrategia empresarial.
La actividad tradicional nos ha llevado a importantes procesos de restauración con el único objetivo de que el entorno natural, tras los años de actividad, fuera mejor incluso a sus condiciones iniciales. En total, la compañía ha rehabilitado 5.000 hectáreas en los cuatro emplazamientos en los que desarrolló históricamente su actividad minera de extracción de carbón: As Pontes (A Coruña), Andorra (Teruel), Peñarroya (Córdoba) y Puertollano (Ciudad Real). Gracias a la recuperación se han observado en las zonas más 600 especies de vertebrados, de las cuales entorno al 70% se encuentran protegidas por la legislación e incluso en alguna zona hasta el 10% son especies amenazadas.
Galicia, Castilla y León, Aragón, Cataluña, Murcia, Castilla y la Mancha, Extremadura, Andalucía e Islas Canarias, son las comunidades autónomas en las que Endesa ha desplegado su actividad de protección de la biodiversidad, acciones que se seguirán extendiendo por todas las instalaciones renovables de Endesa en España.
Hacemos un recorrido por el mapa de la biodiversidad de las plantas renovables de Endesa, con iniciativas adaptadas a las necesidades locales y al entorno de cada proyecto renovable que nos permiten cuidar del entorno al mismo tiempo que producimos energía renovable.
En Galicia destacan iniciativas como lo estudios de compatibilidad de especies como lobos, zorros, corzos y liebre en el entorno de plantas eólicas, pero también se ha logrado preservar especies vegetales que estaban desapareciendo como la Centaurea ultreiae o la Armeria Merinoi, que se recuperan gracias a un programa de mejora de la biodiversidad que está desarrollando la división de energías renovables de Endesa, Enel Green Power España.
En Aragón se desarrollan iniciativas enfocadas en la protección de la avifauna como el Milano Real, la alondra ricotí o el cernícalo primilla en los parques eólicos de Campoliva I, Santo Domingo de Luna, Los Gigantes y Oriche ubicados entre Zaragoza y Teruel.
En Castilla y León Endesa también ha llevado a cabo estudios de sinergias entre las plantas renovables y especies animales como lobos, zorros y liebres, en las plantas eólicas que la compañía tiene en Ávila. Dichos estudios demuestran la convivencia de la tecnología y el medio ambiente. Además, en esta zona donde Endesa desarrolla su actividad de generación renovable a través del viento, la compañía colabora de manera muy estrecha con el colectivo Azálvaro, con el fin de preservar los muladares, concretamente el del Espinar.
En Cataluña se desarrollan numerosas acciones de conservación de la biodiversidad en el entorno de las centrales hidroeléctricas de la compañía. Estas actuaciones están encaminadas a la conservación de especies como el murciélago o la tortuga mediterránea, considerada una especia en peligro de extinción, reintroduciéndola en el embalse de Flix. En el entorno de los embalses de Endesa en Cataluña, se están llevando a cabo estudios específicos para el control de especies como el mejillón cebra con actuaciones concretas encaminadas a la protección del medio ambiente en estos entornos.
Por otro lado, se están llevando a cabo estudios de sostenibilidad de los recursos hídricos ante el cambio climático. En concreto en la cuenta del Noguera Pallaresa se está revelando como una herramienta clave para la conservación de los ecosistemas de la zona.
En la comunidad autónoma de Murcia, Endesa también está llevando a cabo iniciativas innovadoras en lo que a protección de la biodiversidad se refiere. En la planta solar de Totana se está desarrollando un cultivo de especies hortícolas autóctonas bajo los paneles fotovoltaicos, lo que permite desarrollar una sinergia perfecta entre uso del suelo industrial y agrícola al mismo tiempo. En esta planta también se ha desarrollado un corredor medioambiental que sirve no solo de pantalla vegetal, sino también para el anidamiento de varias especies que están encontrando un hábitat seguro en estos entornos. Además, se está utilizando el pastoreo como medida de desbroce natural de la planta solar y se está desarrollando actualmente un sistema de control de plagas a través de la instalación de nidos y posaderos de especies rapaces que pueden terminar de forma natural con las plagas. Una sinergia completa para desarrollar una actividad que permite generar energía limpia.
En Castilla y la Mancha, la planta eólica de Montilla (Cuenca) cuenta con medidas agroambientales en una superficie de 20 hectáreas para favorecer el desarrollo de especies como el sisón común, considerada especie protegida. Medidas que también se aplican en las plantas eólicas de Peña II y Picazo en Guadalajara, donde gracias a una superficie de 20 hectáreas se ha aumentado la interconexión de las metapoblaciones de alondra ricotí, una especie también considerada amenazada.
En Extremadura se están llevando a cabo numerosas acciones con el objetivo de dar un uso al suelo que beneficie al entorno. En muchas plantas, como en Valdecaballeros, Augusto y Logrosán, se llevan a cabo cultivos agrivoltaicos en colaboración con el CTAEX (Centro Tecnológico Agroalimentario de Extremadura), y se desarrollan acciones de protección de avifauna como la siembra de cereal, la instalación de palomares o majanos.
Concretamente, en Logrosán, para el control biológico de plagas se están instalando nidos-posaderos para rapaces, paseriformes y quiróptero, medida que se está empezando a implantar en otras plantas solares como la de Valdecaballeros, donde además se está estudiando la restauración del hábitat de charcas para la conservación de anfibios y reptiles entre otros. Además, tanto en Valdecaballeros como en Logrosán también se llevarán a cabo corredores ecológicos para mejorar el hábitat de aves esteparias.
En Andalucía Endesa cuenta con una de las iniciativas más innovadoras la compañía, como es el apiario solar de la planta fotovoltaica de Carmona, planta donde conviven las ovejas que realizan el desbroce natural del terreno. Además, se han plantado plantas aromáticas para así favorecer la polinización de las colmenas que hay instaladas en la planta. Se trata de una decena de colmenas tradicionales que conviven con otras inteligentes dotadas de la última tecnología.
La planta solar de Carmona también cuenta con una pantalla vegetal y nidos de aves y quirópteros para favorecer el ecosistema local y controlar las plagas.
En la provincia de Málaga, en la que Endesa cuenta con la planta solar de La Vega 1 y La Vega 2, Endesa cuenta con medidas agroambientales en una superficie de unas 60 hectáreas para el desarrollo de aves esteparias, algunas de ellas en peligro de extinción. En esta instalación también se está llevando a cabo técnicas de hacking para el desarrollo de una especie vulnerable como es el cernícalo primilla, medida que también se está implantando en la planta eólica de Los Arcos.
Las centrales hidroeléctricas de Endesa en Andalucía también son foco de biodiversidad con actuaciones para la protección de murciélagos en las centrales de Doña Aldonza, Guadalmena, Tranco de Beas, Pampaneira, Gobantes, Pintado y en la presa de Gaitanejo. En estas plantas renovables Endesa ha instalado casas para esta especie con el fin de controlar su estado y población.
Además, en la central hidroeléctrica de Chillar se están llevando a cabo acciones para el control del sapo partero bético mientras que en la central de Dilar se están llevando medidas para la monitorización de reptiles y anfibios.
En Canarias, Endesa ha puesto en marcha recientemente el primer sistema de iluminación láser a nivel mundial en un parque eólico de Fuencaliente, en La Palma, con el fin de proteger a la pardela. Con este haz de luz láser se pretende que la pardela cenicienta que acude a la isla de La Palma cada primavera a anidar detecte la señal lumínica y modifique su trayectoria de vuelo. El objetivo de este proyecto, que ha sido supervisado por el Gobierno de Canarias, es proteger a las aves en sus vuelos nocturnos.
Este sistema ha sido diseñado mediante un mecanismo de iluminación láser colocado en la torre meteorológica del parque eólico, de manera que su haz de luz se dirigirá hacia el fuste del aerogenerador más próximo al mar para ayudar a las pardelas que llegan desde fuera de la isla a anidar en su aproximación a la costa.
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