Cuidar del funcionamiento de nuestros órganos es de vital importancia para nuestra salud. El hígado es el encargado de digerir los alimentos, eliminar toxinas y almacenar energía, lo que lo constituye en uno de los más importantes para el organismo, por lo que es fundamental saber cómo limpiar el hígado graso. En los últimos años, una de las enfermedades más recurrentes es la conocida como hígado graso, que según Medline Plus es “una afección en la que se acumula grasa en el hígado. Hay dos tipos principales: la enfermedad del hígado graso no alcohólico; y la del hígado graso por alcohol, también llamada esteatosis hepática alcohólica”.
Es fundamental conocer cómo cuidarlo, qué alimentos benefician su desarrollo y cómo limpiarlo cuando se requiere de ello para evitar malestares generales y la propagación de enfermedades que puedan poner en riesgo la integridad física de las personas. Cabe destacar que esta enfermedad que era propia de los adultos mayores debido al paso del tiempo, es ahora cada vez más recurrente en niños y adolescentes, principalmente en quienes tienen sobrepeso, diabetes, obesidad y concentraciones altas de colesterol y triglicéridos. El crecimiento del sedentarismo y los malos hábitos ha hecho que aparezcan cada vez más este tipo de enfermedades que pueden ser altamente dañinas como la malnutrición, enfermedades genéticas raras, o trastornos como lipodistrofias (que hacen que el cuerpo almacene grasa de manera inadecuada). Es importante conocer cómo limpiar el hígado graso y cuáles son las prácticas más adecuadas para protegerlo.
¿Cómo se diagnostica el hígado graso?
Lo primero que hay que saber es que un profesional de la salud será el encargado de diagnosticar la enfermedad del hígado graso a partir de estudios e indicios que impulsen a los pacientes a realizar la consulta. Por ejemplo, el malestar constante en la parte derecha superior del abdomen, sentir cansancio o bien la inflamación o hinchazón de las tripas, aunque también puede haber casos muy silenciosos sin grandes síntomas que indiquen la presencia de una enfermedad.
Esto puede hacer que el profesional prescriba estudios de sangre, una biopsia hepática, como determina la Fundación Favaloro y de allí determine qué tratamiento es el adecuado para el caso, teniendo en cuenta el tipo de enfermedad y el estado general de salud de cada paciente.
Por otra parte, también puede que se consulte por el consumo de alcohol, para determinar si la grasa que se aloja en el hígado proviene de allí o es síntoma de hígado graso; al igual que con medicamentos u otros elementos que pueden ser causal de esta enfermedad.
¿Cómo limpiar el hígado graso?
Una de las indicaciones principales para la disminución de los síntomas de hígado graso es la pérdida de peso, acompañada por un profesional de la salud para no recaer en dietas peligrosas que pongan en riesgo la salud física.
Este descenso de peso contribuirá a reducir la inflamación, bajar los índices de grasa, y a disminuir la fibrosis del hígado. Mientras que, si se trata de un hígado graso por alcohol, la forma de contribuir a su mejora será dejar de lado el consumo de este tipo de bebidas, que puede requerir de un acompañamiento terapéutico si se trata de un consumo problemático.
Adquirir nuevos hábitos para combatir el hígado graso
Modificar rutinas
En la prevención y el tratamiento de la enfermedad es crucial que se modifiquen algunos hábitos del día a día, como por ejemplo, la realización de una rutina de ejercicios, la hidratación adecuada, etc.
Buena alimentación
También, es importante incluir una alimentación rica en nutrientes. No sólo que la misma contenga frutas y verduras, para adquirir variedad de vitaminas y minerales; sino que también se sumen cereales, legumbres y grasas saludables, que se pueden encontrar en aceite de oliva, aguacates o nueces. Es fundamental reducir el consumo de alimentos ultraprocesados, y de aquellos que tienen alto contenido de azúcares y sal.
Vacunación
Cabe destacar que es importante cumplir con el calendario de vacunación contra la hepatitis, ya que si se contrae una enfermedad con un cuadro de hígado graso, puede ser que se culmine en una insuficiencia hepática que puede agravar la situación.
Al igual que es esencial realizar los controles de salud periódicos ya que muchas de las enfermedades del hígado pueden ser silenciosas y no dar algún tipo de señal en el organismo.
También pueden existir otras enfermedades que puedan resultar influyentes en la condición de hígado graso, o bien las medicaciones implementadas para esas enfermedades; por lo que la consulta con un profesional de la salud podría ir en este sentido, con el fin de determinar cómo seguir el tratamiento en el caso de que se combinen enfermedades.
Finalmente, si no se pueden adquirir todos los nutrientes, vitaminas y minerales, de una forma natural, es fundamental que se suplemente con comprimidos dietéticos, y remedios herbarios que puedan suplir las insuficiencias.