Confinamientos y evacuaciones en dos urbanizaciones por un incendio forestal en Villa del Prado (Madrid)

Un incendio forestal sacudió este domingo el municipio madrileño de Villa del Prado, propagándose de forma inmediata debido al fuerte viento en dirección norte, lo que ha afectado al pasto, matorral de jara e instalaciones agrícolas y ganaderas. Entre las zonas afectadas figuran un cebadero y un picadero de caballos. Por el momento, las autoridades han decretado un confinamiento preventivo hasta que se consigan sofocar las llamaradas por completo.

Según han relatado desde el 112 de la Comunidad de Madrid, el incendio se desató alrededor de las «22:30 horas», alimentado por «rachas de viento del norte». La magnitud del fuego obligó a activar la Situación Operativa 1 del plan INFOMA, que se aplica cuando hay riesgo potencial para núcleos urbanos y bienes no forestales.

Como medida preventiva, las autoridades ordenaron la evacuación de nueve viviendas ubicadas en la urbanización Virgen de la Estrella. Asimismo, los vecinos de la urbanización Las Hoyas fueron confinados en sus domicilios para evitar riesgos ante el avance de las llamas. Los agentes no han reportado heridos.

Además, hasta 25 dotaciones de Bomberos de la Comunidad de Madrid han trabajado desde la noche del domingo y continúan en las primeras horas de este lunes para sofocar el incendio.

«Las tareas de control y extinción del incendio están resultando muy difíciles debido al fuerte viento que ha estado soplando durante toda la noche en la zona», ha explicado la portavoz del Servicio de Emergencias del 112 de la Comunidad de Madrid, Encarna Fernández.

De igual manera, Protección Civil ha recordado la importancia de seguir las «indicaciones oficiales»: mantener la calma ante posibles evacuaciones y evitar la circulación por zonas próximas al incendio. También recomiendan cerrar puertas y ventanas para minimizar la entrada de humo en viviendas cercanas.

Por ahora, las autoridades han confirmado que el fuego está «perimetrado» y en fase de control, lo que permite cierto alivio a los vecinos. No obstante, se mantiene la vigilancia en la zona por posibles reactivaciones debido a las altas temperaturas y las condiciones del terreno.