Tips para cuidar el cuero cabelludo seco en invierno y evitar la caspa
El frío puede hacer que el cuero cabelludo acabe deshidratado y con ello que se reseque y acabe apareciendo caspa.
¿Sueles tener el cuero cabelludo seco durante el invierno? Puede que lo notes porque te pica, e incluso si te tocas la cabeza y ejerces cierta presión te duele. Puede también que estés viendo como te ha salido la caspa. Seguro que todo es muy molesto, pero no debes preocuparte ya que vamos a ofrecerte ahora los mejores tips para cuidar el cuero cabelludo seco en invierno y evitar la caspa.
Tips para cuidar el cuero cabelludo seco en invierno
Suele ocurrir, que debido al clima seco, la calefacción, pero también el uso de sombreros, es posible que tengas el cuero cabelludo reseco pero por suerte podemos recurrir a varios remedios naturales que son muy eficaces y resolverán el problema.
De este modo, no dejes escapar estos cuatro tips que os ofrecemos a continuación, ya que si los sigues al pie de la letra, conseguirás que el cuero cabelludo se recupere.
Masajea tu cuero cabelludo para evitar la sequedad durante los inviernos
Masajear el cuero cabelludo de forma ligera y por un tiempo de tan solo cinco minutos, te va a servir para estimular el flujo sanguíneo al cuero cabelludo y mejora su salud. En realidad, el masaje del cuero cabelludo actuará de la misma manera que hacen los masajes faciales, de modo que podrás exfoliar las células muertas de la piel y eliminar el exceso de sebo.
Será buena idea además ayudarte de un poco de aceite de neem para hacer el masaje ya que este es un aceite que tiene propiedades antifúngicas y antibacterianas.
Enjuague el cuero cabelludo seco con vinagre de sidra de manzana
La repentina transición de temperaturas durante el invierno altera el pH del cuero cabelludo y su barrera protectora se vuelve vulnerable a infecciones bacterianas y fúngicas. Un enjuague de vinagre de sidra de manzana ayuda a tratarlo restaurando el pH.
Lo único que tienes que hacer es tener preparado medio vaso de vinagre de manzana en la ducha y cuando te vayas a enjuagar el cabello después de lavarlo, lo echas por encima de la cabeza, mezclando con el agua (ten cuidado no te caiga en los ojos).
Evite las herramientas de peinado térmicas y las duchas calientes
El cabello mojado no se seca fácilmente al aire durante los inviernos, por lo que hay una tendencia a usar demasiado el secador de pelo. Cuando se seca el cabello, también se calienta el cuero cabelludo. El calor excesivo del secador y de la plancha pueden irritar y secar el cuero cabelludo. Además, el uso de herramientas de peinado calientes puede hacer que el cabello se vuelva quebradizo y provocar su rotura. Debes procurar entonces evitar usar este tipo de herramientas, pero en el caso de tener mucha cantidad de pelo y no querer ir medio día con el pelo mojado, procura aplicar siempre un protector térmico antes de secar el pelo.
Por otro lado, debes evitar también las duchas demasiado calientes, ya que eliminan la humedad y los aceites naturales del cuero cabelludo, dejándolo seco y escamoso. Tampoco hacen bien a tu piel, de modo que es mejor una ducha de agua tibia y para el cabello, mejor que acabes de enjuagarlo con agua fría para cerrar así los folículos del cabello y que se vea mucho más hidratado y brillante, además de estar más protegido a los agentes externos.
Cúbrete la cabeza
El clima frío y seco absorbe la humedad del cuero cabelludo y lo seca. Siempre que salgas a la calle, procura cubrirte la cabeza para bloquear los rayos del sol y reducir el estrés causado por los vientos fríos y la lluvia o la nieve.
Cómo evitar la caspa en la temporada de invierno
Muchas veces, junto al problema de tener cuero cabelludo seco en invierno, surge también el de la caspa, un problema vergonzoso y molesto, ya que hace que precisamente el cuero cabelludo nos pique mucho y además, surgen esas manchitas blancas que son tan antiestéticas cuando se ven sobre los hombros del abrigo o por el pelo.
El problema de la caspa se inicia debido a que el cuero cabelludo es incapaz de estar hidratado en invierno, pero además cuando llega esta época del año, solemos intentar lavarnos mucho menos la cabeza para no pasar tanto frío, algo que puede propiciar también la aparición de caspa o que el problema ya existente se agrave.
Pero aunque la caspa es algo común en invierno, esto no significa que no podamos deshacernos de esta molesta condición. De hecho, podemos recurrir también a algunas soluciones simples y efectivas para tratar la caspa.
Una de las primeras cosas que podemos hacer al respecto, será lavarse el cabello con regularidad por mucho que tengamos frío. De hecho, tendrás que lavar el cabello no más de 2 o 3 veces por semana usando el tipo de champú adecuado. Elige un champú que tenga una fórmula hidratante para tratar la caspa. Lavar a fondo con los dedos y dejar actuar sobre el cabello durante al menos 1 minuto antes de aclararlo. Si no puedes tolerar el agua fría, usa agua tibia para lavarse el cabello.
Como ya hemos mencionado anteriormente, debes evitar también el uso de uso de agua caliente, pero además será bueno cepillar o peinar bien el cabello para evitar o eliminar la caspa que caiga sobre los hombros. Además, el cepillado puede estimular el flujo sanguíneo al cuero cabelludo, lo cual es importante para un cabello sano y sin caspa.