Los 46 años de Letizia: así ha cambiado el estilo de la Reina de España desde su último cumpleaños

Poco queda ya de aquella periodista que se presentó al mundo como la prometida del todavía entonces Príncipe Felipe. Han pasado casi 15 años desde que Letizia Ortiz presentó su último informativo y, al echar la vista atrás, cuesta reconocer en aquella mujer de blanco y mirada tímida a la Reina que hoy pone orden en Zarzuela.

Además de por su carácter, cada vez más regio, o por los notables cambios físicos que tuvieron como pistoletazo de salida su intervención de nariz por motivos de salud, la Reina ha ido depurando su estilo a la hora de vestir, confirmándose como uno de los iconos de moda, no solo entre las mujeres de la realeza sino también en comparación con el ‘star system’.

Hoy doña Letizia celebra su 46 cumpleaños y lo cierto es que, en el último año, ha habido varios cambios en clave de estilo que, todo apunta, podrían haber llegado para quedarse.

El destierro de Varela

Cuando doña Letizia empezó a alternar sus modelitos de Felipe Varela con los de firmas extranjeras como Hugo Boss o Carolina Herrera, el hecho de que el español fuera la única firma nacional perenne en el armario real daba cierta tranquilidad a la marca. De la Reina de España se espera (o esperaba) que de visibilidad al trabajo nacional por lo que el sitio del que ha sido durante tantos años su diseñador de cabecera parecía fijo en su vestidor, pero algo podría haber cambiado.

Tal y como llevamos tiempo reflejando desde LOOK, entre la monarca y el modisto podría existir un distanciamiento profesional, causa que justificaría la cada vez más notable ausencia de nuevos diseños de Varela en los eventos de Doña Letizia. Si bien es cierto que no ha dejado de usar algunos de sus complementos, como el bolso rojo de piel que lució hace justo una semana durante el primer acto de su hija Leonor como Princesa de Asturias, el hecho de que apostase por Carolina Herrera para un acto así fue algo, cuanto menos, desconcertante.

La consolidación de Gold & Roses

Letizia había lucido un original par de pendientes de esta firma de joyería nacional en varias ocasiones. Una estrella y una bolita de oro, con una larga cadena que colgaba por detrás, es el primer par (con trampa) que la Reina estrenó de Gold & Roses. Decimos con trampa porque, aunque ella los luzca siempre igual, lo cierto es que no se venden mezclados, sino que para poder llevarlos así hay que comprar los dos juegos; el de bolitas y el de la estrella.

En junio de 2017 la mujer de Felipe VI llevó por primera vez su segundo modelo de la firma y desde entonces son incontables las ocasiones en las que los «pendientes daga» han adornado las orejas de la experiodista. Si durante su etapa como Princesa de Asturias fueron las famosas estrellas de Chanel los pendientes que Letizia convirtió en un básico de su joyero, como Reina de España son estas alhajas de oro blanco y diamantes las que parecen haber llegado para quedarse.

¿Qué fue de Lodi y Magrit?

Como Princesa de Asturias Letizia consiguió, a base de repetir siempre el mismo modelo, que se rebautizara como ‘Letizios’ a los salones con plataforma que lucía en prácticamente cualquier color según su estilismo. Poco a poco, la madre de Leonor y Sofía se fue deshaciendo de aquel característico calzado y empezó a confiar sus pies a Magrit y Lodi. Ambas firmas españolas, son casi incontables las ocasiones en las que Doña Letizia ha apostado por alguna de estas dos casas de zapato que ahora, tal y como ocurre con Felipe Varela, se han visto desbancados por una firma extranjera.

La creciente pasión de Letizia por Carolina Herrera y Hugo Boss ha alcanzado también el zapatero de la Reina, siendo cada vez más habitual verla calzando diseños de ambas firmas, siendo la venezolana por la que más debilidad siente.