¿Exceso de cirugía o cambio natural? La metamorfosis de Catherine Zeta Jones revoluciona la prensa
Si bien hace apenas una semana nos planteábamos si la belleza de Catherine Zeta Jones había ganado a los largo de los años, a raíz de una de sus últimas apariciones en un evento en Cannes, la imagen con la que sorprendió recientemente en los premios FIFA The Best nos ha resuelto cualquier atisbo de duda. No. La actriz mostraba una cara muy distinta a la que estábamos acostumbrados, y en la que se podía adivinar una visita de urgencia a su cirujano.
A punto de cumplir 50 años, la estrella parecía hacer gala de una evolución natural del paso del tiempo que ayer se encargó de echar por tierra. Óvalo facial muy definido, pómulos excesivamente marcados, cejas demasiado elevadas y un maquillaje no demasiado acertado -como ya le ocurriera a Uma Thurman- evidenciaban que algo había cambiado en su rostro en muy pocos días.
Puede que unos dudosos retoques estéticos sean la respuesta a esta nueva imagen de Catherine que, sin duda, ha perdido parte de su encanto y belleza natural. Todo hace pensar que la oscarizada actriz haya querido detener el paso del tiempo, sucumbiendo así a la cirugía plástica con la consiguiente falta de expresividad y perdida de sus facciones. El mismo caso que ya sucedió en el pasado con otras celebs, como Renee Zellweger, Nicole Kidman o Courteney Cox.
Esta metamorfosis de Catherine Zeta Jones no ha pasado desapercibida para la prensa internacional, que se ha preguntado atónita qué ha pasado con la guapa protagonista de La máscara del Zorro. El miedo a envejecer suele ser un mal común que afecta a casi todas las actrices de Hollywood una vez pasada la cuarentena o, incluso, la treintena. El temor a perder papeles o encasillarse en determinados roles de mujer madura es algo que no todas las intérpretes están dispuestas a aceptar.