5 Bebidas refrescantes para preparar en casa y evitar los ultraprocesados
Para refrescarse y guardar la línea, nada como hidratarse con bebidas caseras fáciles de hacer
Ejercicio, dieta equilibrada y beber agua, esa es la base de tener una vida saludable, y eso incluye desterrar los ultraprocesados en todas sus modalidades, algo harto difícil pero que cada vez va cobrando más ‘adeptos’. Y no solo en lo referente a la comida, sino también en lo que a bebidas se refiere. Llega el buen tiempo y con el calor parece que, además de una cerveza fresquita -perfecta por los beneficios que aporta si se consume con moderación-, los refrescos van conquistando cada vez más espacio en nuestra nevera. Es importante estar hidratado en cualquier época del año, pero muy especialmente con la subida de las temperaturas.
Pero la importancia de la hidratación no es sinónimo de darse a las bebidas carbonatadas y con azúcares añadidos, aún en su versión ‘light’. Aprovecha la gran variedad de frutas y descubre cómo el agua, uno de los bienes más preciados, tiene un sinfín de maneras de convertirse en algo de lo más apetecible. Y esto es válido tanto para los que la botella de agua es una extensión de su brazo, como para aquellos a los que beberse un vaso de agua ‘les cuesta la vida’. Toma nota de las siguientes bebidas que puedes hacer en casa para refrescarte y que te harán olvidarte de los ultraprocesados.
Agua de melocotón y hierbabuena
Para no echar de menos las burbujitas de los refrescos.
Ingredientes: 1 melocotón maduro, litro y medio de agua con gas, 5 hojas de hierbabuena.
Preparación: Pela el melocotón y quítale el hueso. Córtalo en trozos grandes y mételo, junto con las hojas de hierbabuena, en las botellas que vayas a usar. Añade el agua y déjalo enfriar durante al menos 6 horas.
‘Lemonade’ típicamente americana
La limonada es una de las bebidas americanas que más disfrutan cuando aprieta el calor y de lo más sencilla y refrescante.
Ingredientes: 5 limones, 400 ml de agua, 100 g de azúcar moreno, 20 g de ralladura de limón y 10 cubitos de hielo.
Preparación: El secreto está en preparar primero un jarabe con el endulzante y el agua, de tal manera que quede perfectamente disuelto y así quitar la acidez de los cítricos. Ponemos el agua y el endulzante en un cazo con unas cortezas de limón. Llevar a ebullición hasta disolver el azúcar. Dejamos enfriar y reservamos. Ponemos la mitad del jarabe en el fondo de una jarra amplia, cortamos los limones por la mitad y reservamos unas cuantas rodajitas finas para añadir luego como decoración. Exprimimos los limones y rellenamos la jarra con agua fría removiendo ligeramente. Añadimos el hielo y metemos en la nevera hasta que termine de enfriar.
Limonada de Sandía y menta
La sandía, la estrella del verano.
Ingredientes: 1 kilo de sandía, 20 hojas de menta fresca, dos cucharadas soperas de azúcar moreno, 3 limones, 1 l de agua y mucho hielo
Preparación: Pela la sandía y quita las semillas. Córtala en trozos y reserva. Lava la menta y machácala en una jarra junto con el azúcar. Introduce la sandía en la licuadora con el agua y el zumo de los limones y licua hasta obtener un líquido homogéneo. Vierte la mezcla en la jarra y agrega un puñado de hielos. Remueve bien y enfría bien.
Granizado de café
Para los más cafeteros, este granizado no puede faltar.
Ingredientes: 500 ml de café, 60 g de azúcar moreno y 8 ml de zumo de limón.
Preparación: Prepara una buena cafetera con un café de calidad y mientras sube calienta 100 ml de agua y disuelve en ella 3 cucharadas de azúcar. Remueve y deja reducir durante 5 minutos hasta obtener un jarabe que mezclamos con el café. Añade el zumo de limón y vuelve a mezclar. Coloca la mezcla en un tupper y congélalo durante 2 horas. Una vez transcurrido este tiempo rompe los cristalitos de hielo y vuelve a congelar. Hay que repetir esta operación cada media hora hasta que todo el contenido sea similar a hielo picado.
Agua con sabor a lavanda y arándanos
Gracias a ‘MasterChef’ supimos que hay flores comestibles que casan a las mil maravillas también con las bebidas. Un claro ejemplo es esta, para los más atrevidos.
Ingredientes: 1 taza de arándanos congelados, 2 l de agua, hielo y flores de lavanda al gusto.
Preparación: Tan solo tienes que mezclar los ingredientes en una jarra y dejarlos enfriar al menos durante 3 horas.