El secreto que Victoria Federica ha logrado mantener oculto hasta los 18
La hija de la infanta Elena ha sucumbido a una de las modas del momento
Hay pocos datos que todavía se desconozcan de Victoria Federica de Marichalar y Borbón. Poco a poco durante los últimos años ha ido dejándose conocer más, apareciendo más en público y haciendo constar que es una joven discreta, risueña y de carácter afable. Pero, a pesar de lo mucho que se ha escrito sobre ella en los últimos días por haber alcanzado la mayoría de edad, hay un detalle que ha logrado mantener oculto y que LOOK desvela.
El cambio de imagen de Victoria Federica ha sido latente sobre todo en el último año. La hija de la Infanta Elena ha cambiado su estilo de niña por uno mucho más juvenil, de un tiempo a esta parte se alisa el pelo y empieza a tener un estilo cada vez más definido. Este verano, incluso, ha agotado algunas de las prendas o complementos que ha estrenado, como es el caso de unas gafas de sol de una conocida marca que lució para navegar. Pero estos no han sido los únicos cambios que ha sufrido su físico, Victoria Federica ha decidido adornarlo con dos tatuajes de los que todavía no ha trascendido el significado.
Dos tatuajes
El primero es una pequeña concha que luce en la parte interior de su muñeca izquierda. No es fácil que se vea por el lugar donde está colocado y por el amplio número de pulseras que siempre lleva puestas. Se trata de un discreto dibujo con un motivo que parece gustarle mucho, una concha, pues no es extraño verla en verano con pulseras o tobilleras compuestas por este tipo de cuentas.
El segundo tatuaje es todavía un misterio. Debe estar estratégicamente situado en algún lugar de su cuerpo que normalmente lleva cubierto con ropa. En este caso eligió tres puntitos que con toda seguridad para ella tendrán algún tipo de significado especial. Como no hay imagen alguna de ellos no se puede afirmar con seguridad, pero los tres puntos son un tatuaje recurrente que viene a simbolizar los puntos suspensivos que se utilizan al escribir y viene a decir algo así como que hay algo en tu vida que no ha acabado o en lo que no quieres rendirte.
No es la primera Borbón tatuada
Los tiempos han cambiado y tatuarse es cada vez más común. De hecho, Victoria Federica no es el único miembro de los Borbón que ha adornado su piel con tinta. Simoneta Gómez Acebo, en su juventud, eligió una mariposa para dibujársela en el tobillo. ¿Contará alguna vez Victoria el significado de sus tatuajes?