La falta de respeto con la que Laurent de Bélgica emula a doña Letizia
El Príncipe ha dejado atónitos a los presentes con su comportamiento en el Día Nacional de Bélgica.
Laurent de Bélgica vuelve a estar en el foco de la polémica. El hermano del rey Felipe ha sido incapaz de respetar el protocolo que rige un acto oficial, en concreto el del desfile militar del Día Nacional de Bélgica y no ha tenido inconveniente en atender a su teléfono móvil desde la tribuna en la que se encontraba en compañía de su esposa, la princesa Claire.
Ni corto ni perezoso, el hijo de Alberto II se ha pasado la mayor parte del acto mirando la pantalla de su dispositivo e incluso contestando llamadas, sin importarle que algunas autoridades requerían su atención. Una situación que ha provocado la indignación en la prensa local y en las redes, que no dan crédito a cómo el Príncipe no ha respetado la solemnidad del acto y ha hecho caso omiso a las llamadas de atención de su esposa y a las miradas de desaprobación por parte de los Reyes.
🇧🇪 Onvoorstelbaar! Prins Laurent belt tijdens het defilé op de nationale feestdag. Op een gegeven moment lijken koning Filip en koningin Mathilde dat door te hebben – ze kijken in zijn richting. Echtgenote prinses Claire lijkt hem ook duidelijk te maken dat dit niet kan. pic.twitter.com/MQ0Vzpfgkp
— [Wim Dehandschutter] (@WDehandschutter) 21 de julio de 2019
Aunque el comportamiento de Laurent roza lo extremo y en su caso no sorprende debido a que los belgas están más que acostumbrados a sus constantes salidas de tono, lo cierto es que las imágenes del Príncipe ‘móvil en mano’ recuerdan irremediablemente a una circunstancia similar en la que se ha visto en varias ocasiones a la reina doña Letizia.
No es extraño que la esposa de don Felipe en sus momentos de ocio aparezca con el móvil en la mano. Es más, la Reina cuenta con dos teléfonos para su uso particular, uno para cuestiones personales y otro para temas oficiales. Sin embargo, en más de una ocasión se ha visto a doña Letizia prestando excesiva atención a su teléfono, incluso en actos oficiales. De hecho, durante un 12 de octubre, se criticó que la Reina estuvo muy pendiente de su móvil en el coche en lugar de saludar a las personas que esperaban en las calles. Igual que el día de la proclamación que, al parecer, también la Reina iba con el móvil en la mano durante el recorrido por la capital. Desde luego su falta no es tan grave como la de Laurent, pero no pasa desapercibida. Juzguen ustedes.