La estrategia de la reina Isabel para motivar la reaparición del duque de Edimburgo
La monarca disfrutará de la celebración oficial de su cumpleaños dos días después de la del príncipe Felipe, que no quiere festejar sus cien años de vida de una manera especial.
Por muy extraño que pueda parecer, la reina Isabel celebra cada año su cumpleaños por doble partida. La monarca cumple los años en el mes de abril, pero es en junio cuando celebra por todo lo alto su aniversario, coincidiendo con el desfile militar con motivo del “Trooping the Colour”. Una tradición que se remonta a la época de Jorge II. Fue este rey quien decidió hacer coincidir la celebración de su cumpleaños con el desfile militar en 1748, cuando este ya contaba con un siglo de antigüedad.
Desde entonces, todos los monarcas británicos han mantenido la tradición y la reina Isabel solo había faltado a esta importante jornada una vez a lo largo de su reinado. La crisis sanitaria del coronavirus provocó que el pasado año la celebración se tuviera que anular y en su lugar la Reina asistió a un reducido desfile militar en el Castillo de Windsor, donde permanece recluida desde el inicio de la pandemia.
A pesar de que aún es pronto para tener certeza en torno a cómo van a desarrollarse los acontecimientos este año, parece que desde Buckingham ya tienen previsto que el “Trooping the Colour” se celebre según lo previsto, aunque manteniendo ciertas restricciones en cuanto a público y medidas de seguridad. Si la situación no empeora, la Familia Real al completo -con la duda de los duques de Sussex y la lógica ausencia del príncipe Andrés- podría reencontrarse por primera vez en un acto oficial de cara al público en mucho tiempo. Es cierto que hace unas semanas, tanto el príncipe de Gales y su esposa como los duques de Cambridge y los condes de Wessex mantuvieron un encuentro con la Reina, pero no podría considerarse como un acto a gran escala, ya que además faltaban varios de los miembros de la familia Windsor.
Ya se ha confirmado que la fecha elegida este año es el 12 de junio. Una jornada que no es baladí y que tiene importantes implicaciones. Y es que dos días antes el duque de Edimburgo cumple cien años. Aunque se rumorea con que se han puesto en marcha algunos preparativos para que el marido de la Reina festeje por todo lo alto su llegada al siglo de vida -muy al estilo de lo que ocurrió cuando la reina madre cumplió cien años-, lo cierto es que el príncipe Felipe no quiere ni oír hablar de esta cuestión. El marido de la reina Isabel lleva años retirado de la escena pública y solo reaparece en actos de carácter privado, como pueden ser bodas. Además, ha declarado en numerosas ocasiones que él no quiere festejar de manera especial sus cien años, para disgusto no solo de la Reina sino del resto de la población.
Sin embargo, el hecho de que el príncipe Felipe cumpla los años el 10 de junio y que el “Trooping the Colour” se vaya a celebrar el día 12 hace pensar en la posibilidad de juntar ambas fiestas en una. Es cierto que a nivel privado el duque de Edimburgo tendrá su propia celebración a la que estarán invitados todos los miembros de la familia, sin excepción -incluido el príncipe Andrés-, pero quién puede dudar de que, ya que la Reina cumple noventa y cinco y el Príncipe cien, ¿vayan a celebrarlo juntos? Al fin y al cabo ambos ya han recibido la vacuna contra el coronavirus y es un momento perfecto para que el príncipe Felipe vuelva a participar en la agenda oficial sin necesidad de tener un acto exclusivo para él. De momento habrá que esperar un tiempo a ver cómo se desarrollan los acontecimientos.