Iñaki Urdangarin obtiene la semilibertad y participará en el programa de reinserción para delincuentes económicos
El marido de la infanta Cristina dejará atrás la cárcel de Brieva en Ávila y se trasladará al Centro de Inserción Social de Alcalá de Henares, desde donde podrá salir para realizar algunas actividades concretas.
Buenas noticias para Iñaki Urdangarin. El cuñado de Felipe VI podría empezar a disfrutar muy pronto de un régimen de semilibertad. Así lo han confirmado fuentes oficiales de Instituciones Penitenciarias, que han propuesto que el exduque de Palma participe en el programa de reinserción para corruptos.
De esta manera, el marido de la infanta Cristina abandonaría la cárcel de Brieva ubicada en Ávila, donde cumple condena desde el mes de junio de 2018 y pase al centro de Inserción Social de Alcalá de Henares. La Secretaría General de Instituciones Penitenciarias acaba de determinar que se le aplique al exdeportista el artículo 100.2 del Reglamento Penitenciario, lo cual supone que disfrute de un régimen similar al tercer grado. A este respecto, Urdangarin deberá cumplir con el resto de la pena según un plan elaborado por Prisiones y que, junto a sus salidas diarias para ir a trabajar, incluirá su participación en el nuevo programa de reinserción de delincuentes económicos (PIDECO) que se pone en marcha desde el ministerio del Interior en el mes de enero.
El exduque de Palma ha pasado interno en el módulo masculino de la cárcel de Brieva dos años y medio de los cinco años y diez meses de condena que se le impuso por su vinculación con el caso Nóos. Se prevé que Urdangarin pueda salir a diario para trabajar con la institución con la que colabora desde hace algo más de un año, el Hogar Don Orione, donde realizaba labores de voluntariado tres veces por semana hasta la fecha. Una vez concluida su jornada deberá regresar a dormir al centro penitenciario y no se contempla que pase los fines de semana fuera, salvo uno al mes, que tendrá de permiso.
Esta decisión por parte de Instituciones Penitenciarias llega después de que la Junta de Tratamiento de la prisión de Brieva hubiera propuesto dar un paso más en lo que respecta a Urdangarin, esto es, la posibilidad de concederle el tercer grado o régimen abierto. Esta opción le habría permitido tener que ir solo a dormir de lunes a jueves, pasando los fines de semana en libertad. Finalmente, desde Prisiones se ha optado por una fórmula a medio camino, esto es, que el exdeportista permanezca el segundo grado pero aplicándole el articulo 100.2 del Reglamento Penitenciario, lo que le permitirá disfrutar de una parte de los beneficios penitenciarios de la semilibertad. Aunque la medida es de aplicación inmediata, lo cierto es que puede ser recurrida por la Fiscalía ante el juez de Vigilancia Penitenciaria en primera instancia y, posteriormente, ante el tribunal que juzgó el caso Nóos, la Audiencia de Palma.
Si se diera el caso de que Urdangarin no aceptara participar en este programa de reinserción para delincuentes económicos, Instituciones Penitenciaras podrían decidir dejar de aplicarle el artículo 100.2 de flexibilización del régimen de vida, lo que le llevaría de vuelta a la prisión de Brieva. Sin embargo, si decide acogerse a la medida y no hay ningún recurso por parte de la Fiscalía o la Audiencia de Palma, el marido de la infanta Cristina deberá participar en un mínimo de 32 sesiones grupales hasta superar siete unidades terapéuticas. En ellas comentará con un psicólogo, conceptos como la autoestima, las emociones, el sistema de valores y la responsabilidad. El programa tiene una duración de 10 u 11 meses y finalizaría con la participación de Urdangarin en un encuentro restaurativo en el que se deberá sentar frente a frente con alguien que ha sufrido las consecuencias de su actuación.