Tamara Falcó se sincera en televisión: sus secretos más íntimos al descubierto

Tamara Falcó se ha convertido en una estrella televisiva sin apenas percatarse. La hija de Isabel Preysler protagoniza hoy su último programa de ‘Masterchef Celebrity’ donde, según las apuestas, tiene muchas posibilidades de convertirse en la flamante ganadora. Durante los tres meses que ha durado el concurso culinario, los focos del plató le han hecho brillar convirtiéndola en la celebrity más deseada.

Su naturalidad y transparecía han provocado que Tamara haya regalado algunos de los momentos más gloriosos. Así, semana tras semana, la hija del Marqués de Griñón ha ido lanzando pildoritas sobre su vida privada que se han convertido en lingotes de oro para los espectadores. Todo un ejemplo de entrevista televisada y desmenuzada por semanas que Tamara ha concedido sin darse cuenta.

Su hiperbólica inocencia, su aparente sencillez con toques clasistas y su devoción religiosa son los rasgos que definen a la que ya podemos llamar ‘animal televisivo’.

Desgranando todas sus confesiones, de Tamara hemos descubierto que no solo tiene la habilidad de percibir el intenso sabor de la carne de conejo, sino que además no gasta en reparos para deshojar sus pieles con sus propias manos junto a Los Chunguitos a quienes ha invitado a su casa de Miraflores. Esta, quizá, fue una de las primeras imágenes con las que conquistó a los espectadores más excéntricos.

Confesiones sobre su familia

Un público que ha visto pasar a Tamara Falcó de los photocall más selectos -ataviada con sus prendas más elegantes- a las cocinas más recónditas con un vaquero y un polo como vestimenta.  En uno de sus ataques de sinceridad, Tamara también ha manifestado el tipo de educación que ha recibido en su casa tildando a su madre como “una mamá gallina” que nunca le ha dejado enfrentarse a los fogones por su miedo a que le pasara algo. “Mi madre tenía miedo de que me acercara a los fuegos, a los cuchillos y todo eso… Entonces la repostería era algo que me dejaban practicar”, afirmaba.

Ahora España entera tiene mucha más información de una de las socialités por excelencia, Isabel Preysler. De ella conocemos su fobia al olor a pescado o su sorprendente inicio de relación con Carlos Falcó. “El matrimonio de mis padres empezó muy mal. Se fueron a una isla desierta y mi madre comía sándwiches todo el tiempo. Y, de repente, mi padre dijo: ‘Voy a pescar un pescado y me lo vas a cocinar”, confesaba Tamara en uno de los programas.

La diseñadora también revelaba algunas de las filias de su madre como la de llevar siempre un trozo de chocolate en el bolso por si el hambre aprieta. Del escritor Mario Vargas Llosa, -su tío Mario, como le llama cariñosamente- también ha expuesto algunos detalles desconocidos hasta la fecha como su carácter famélico. “Es un glotón y no le hace ascos a nada”.

A pesar de que todos los personajes más mediáticos del clan se han mantenido al margen durante todas estas semanas, lo cierto es que Tamara nos ha descubierto a otros rostros desconocidos como su primo Álvaro Castillejo. El joven, hijo de Beatriz, hermana de Isabel Preysler- acudió al programa para ayudar a su prima. “Somos como hermanos”, confesaba Tamara cariacontecida tras la inesperada visita. Además, hacía un guiño a su hermano Julio confesando que este y Álvaro son los familiares que mejor carácter tienen de toda la familia.

Pero Álvaro no fue la única visita. Su hermana por parte de padre, Xandra Falcó también fue una de las invitadas al espacio culinario demostrando que mantienen una estrecha relación. Junto a Xandra acudió su hija pequeña de la que Tamara es su madrina. Una noticia desconocida hasta la fecha.

Con su participación en ‘MasterChef Celebrity’ Tamara ha conseguido tener una entidad propia y cambiar el estigma con el que entró en el programa.