Jorge Javier vs. María Teresa: cronología de una decepción

Los desencuentros entre Jorge Javier Vázquez y María Teresa Campos vienen de lejos. El último ha terminado con la ruptura de una relación de respeto profesional y de amistad que duraba veinte años. La entrevista de la malagueña en ‘Sábado Deluxe’ dinamitó todo y durante esta semana se han ido recogiendo respuestas de todo tipo, desde la profunda decepción que dice haber sentido Jorge Javier hasta la de Alejandra Rubio como altavoz improvisada de Las Campos.

El presentador de ‘Sálvame’ no escondió que se sintió profundamente decepcionado por María Teresa, una mujer a la que conoce desde hace dos décadas y que junto a Jorge han sido dos de los presentadores más carismáticos en los últimos años. El vínculo entre ambos ha sido tan estrecho siempre que las fricciones han hecho saltar chispas más de una vez. La Campos contó con el catalán para el programa ‘Día a día’ pero cuando Jorge salió rumbo a ‘Aquí hay tomate’ comenzaron las discrepancias. Un agravante para las disputas entre ambos fue el fichaje de María Teresa por Antena 3.

Jorge Javier hizo un alegato muy polémico sobre cómo era la andaluza como jefa: «No era mala persona, era dura, pero es que esta no es una profesión de débiles. Pero, vamos, que tampoco era Lucifer. La cogimos por banda y le dimos cera para aburrir. No supe cortar a tiempo y recuerdo que uno de mis miedos recurrentes que le contaba a mi psicóloga era encontrármela. Dejé de acudir a estrenos en Madrid y paseaba por los aeropuertos con mis radares encendidos», confesaba el presentador en su blog de ‘Lecturas’ en el año 2019.

Los primeros enganchones

Las aguas volvieron a su cauce cuando María Teresa Campos adquiriera el rol de defensora de la audiencia en ‘Sálvame’. Jorge Javier Vázquez ya se había hecho fuerte en esa plaza y no dudó en seguir con alguna que otra pulla: «Aceptamos las críticas, no quiero que sea lo que tú hacías en ‘Día a Día’, que todo el mundo decía que eras la mejor».

La Campos no se quedó callada: «No vayamos a empezar a decir tonterías y a inventarnos cosas, que voy a decir lo que tu hacías cuando estabas en ‘Día a Día. Hacías la pelota porque querías ser yo». Unas palabras duras y a las que Jorge respondió con más franqueza: «Pues no he debido hacerlo mal del todo, porque lo he conseguido». A eso se le unió el dardo de Jorge con la dificultad que tuvo Teresa para encontrar un programa: «Te cuesta mucho ponerte a trabajar».

Desde entonces hubo años de calma, de respeto profesional y de suavizar tensiones. Pero sin comerlo ni beberlo se llegó al último choque de trenes hace unos días. Una discusión que dejó muy herido a Jorge. María Teresa tiró a dar al decirle que le iba a dar otro ictus y que ni tan siquiera su expareja, Paco, le quería. Jorge mostró 48 horas después su tristeza por este encontronazo: «Tuve que hacer un serio ejercicio de contención para no responder a ninguna de las provocaciones de las que fui objeto durante todo el tiempo que duró la entrevista porque desde el momento en el que Teresa se sentó su único propósito era sacarme de mis casillas y que yo ofreciera la peor versión de mí mismo. No lo consiguió, pero no siempre es posible. Y que unas trampas te vengan por parte de una señora a la que conoces y quieres desde hace 20 años… Entenderán cómo me siento y qué desazón tengo (…) desde aquí tengo que decir que yo no tengo ningún interés ya en tener ningún tipo de relación ni con ella ni con sus hijas. Me siento profundamente liberado porque no es la primera vez que Teresa Campos me ha maltratado en un plató de televisión».

¿Habrá más enfrentamientos entre ambos?