Todos los detalles de las tres fincas que aún están a nombre de Paquirri y que Pantoja quería ocultar

El testamento de Paquirri vuelve a estar en el centro de la polémica cuatro décadas después de su mortal cogida en la plaza de toros de Pozoblanco. Hace unos días, trascendió el motivo por el que los hijos mayores del diestro, Francisco y Cayetano Rivera, no han vuelto a reclamar a Isabel Pantoja la herencia que les corresponde y que la tonadillera tenía en Cantora, una de las fincas que compró el diestro.

El motivo por el que no dan un paso adelante los hermanos Rivera Ordoñez para reclamarla, tal y como explicó Joaquín Moeckel en D Corazón, su abogado, a pesar del valor sentimental de los enseres de su progenitor, sería por no enfrentar judicialmente a su hermano Kiko y a Isabel Pantoja, madre e hijo, después de que el marido de Irene Rosales asegurara en Cantora: la herencia envenenada, que vio los trastos de torero de su padre en una habitación de la finca familiar a pesar de que la tonadillera siempre ha defendido que fueron robados.

Durante los últimos días, el foco ha estado puesto en las propiedades, concretamente en tres fincas localizadas en Andalucía, que adquirió el torero y que siguen estando a su nombre y al de la intérprete de Marinero de Luces.

¿Cuál es la situación actual de las tres fincas?

La revista Semana ha tenido acceso a los documentos que acreditan «las fincas comprendidas en los números 6 y 7 del apartado B de los bienes privativos». La primera de las propiedades son las fincas 1388 y 7628 ubicadas en Medina Sidonia de 27 y 16 hectáreas respectivamente. Ambos terrenos se unieron bajo el nombre de El Guatito. Fue en el año 1992, doce años después de la trágica muerte de Paquirri, cuando la tonadillera las vende a Ángel Vilariño Fontecoba por un total de 80 millones de pesetas (casi quinientos mil euros) y por el que hizo tres pagos. En el primero de ellos abonó una cantidad de 20 millones tras la firma del contrato y, los dos restantes los liquidó antes del 2 de enero de 1994. Una propiedad que heredó el vástago de Vilariño tras su muerte y cuyos titulares de la misma son el progenitor de Francisco y Cayetano Rivera y la tía de Anabel Pantoja.

La tercera de ellas se trata de La Garza, la finca que la artista regaló a su amiga Encarna Sánchez en 1994, que también está localizada en Medina Sidonia y que consta de 37 hectáreas. Este terreno se trata de un regalo que Paquirri le hizo a su primera mujer, la siempre recordada Carmina Ordoñez, que sigue siendo titular (no propietarios) de la misma junto al padre de sus dos hijos mayores. Por motivos que se desconocen, ni la locutora de Mesa Camilla ni Pantoja cambiaron a su nombre la finca que, la comunicadora, dejó en herencia a Clara Suñer y que vendió al mismo comprador que adquirió El Guatito.

Tal y como recoge el medio citado, tras el fallecimiento de Rivera, la intérprete de Hoy Quiero Confesar, por razones que no son públicas, no cambió ni modificó la titularidad de ninguna de ellas, por lo que cuarenta años después de su pérdida, Paquirri sigue apareciendo como propietario de fincas que actualmente pertenecen a terceros.