Las grandes victorias de Francisco Rivera a sus 50 años
El hijo de Carmen Ordóñez disfruta de su madurez en familia y centrado en sus negocios
Descubrimos el lado más desconocido de Francisco Rivera
Francisco Rivera cumple 50 años, una cifra redonda que invita a quien la cumple a echar la vista hacia atrás para ver el camino recorrido, mientras se disfruta de una madurez perfecta. Un buen paradigma de esto es el torero, que desde que se cortó la coleta no puede decir que su vida sea monótona. La familia y los negocios son los dos pilares que sustentan la vida del hijo de Carmen Ordóñez desde que dijo adiós a los ruedos, en 2017. Además, ahora le ha sumado sus recientes palabras a corazón abierto en televisión, que dejan a la luz su versión más humana, natural y sincera.
A lo largo de estas cinco décadas, Francisco Rivera ha adquirido una experiencia desde la que reposa y destila sus vivencias cada vez que se pone delante de un micrófono. Ha logrado formar una familia idílica junto a Lourdes Montes y sus dos hijos en común. Y aunque ahora haya adquirido notoriedad su infructuoso matrimonio con Eugenia Martínez de Irujo, bien es cierto que junto a la hija de la duquesa de Alba tuvo a su primera hija, Cayetana Rivera, una de las personas más importantes y esenciales de su vida, y de la que hace unas semanas Look contaba su prometedor futuro como organizadora de eventos VIP.
¿Cómo le ha ido al diestro durante estos 50 años que alcanza este miércoles 3 de enero? Los trajes de luces no siempre han traído claros, porque también ha habido nubes, como todo hijo de vecino. Sin embargo, una persona con su naturaleza optimista hace un balance positivo del camino recorrido, aunque no siempre haya sido de vino y rosas.
Si su vida se resumiera en grandes apartados, su familia e hijos ocuparían un lugar de honor. El 14 de septiembre de 2013 se casaba por segunda vez -pero esta sería la definitiva- con Lourdes Montes, en una ceremonia civil oficiada por el entonces alcalde de Sevilla, Juan Ignacio Zoido Álvarez. Junto a la modista andaluza empezó un sólido proyecto de vida que sigue latiendo con fuerza y la ilusión del primer día. Ambos se tocaron mutuamente la tecla de la felicidad y disfrutan de su matrimonio afincados en una coqueta casa ubicada en Sevilla.
Guardado el traje de luces para siempre, el adiós de Francisco Rivera al toreo supuso la aceleración de otros proyectos que tenía en marcha desde hace años. El hijo de Paquirri supuso diversificar sus inversiones, regando sus negocios hasta hacerlos rentables, algo que no siempre es fácil. Las tres principales empresas que el diestro genera son Bari 2015, Tazdevil SL y Nan Madol SL . Un triángulo a todas luces exitoso y que ha logrado una suma entre los ingresos en ventas de las tres de más de 1,5 millones de euros y un activo total por encima de los 7 millones de euros.
La primera se dedica a la organización de espectáculos taurinos y la contratación de artistas. Y es que dice el argot propio que un torero nunca deja de serlo, como si de viejos roqueros se tratara. La segunda empresa es mediante la cual gestiona sus derechos de imagen y sus últimos datos son muy positivos. En cuanto a la tercera, se trata de una de sus principales vías de negocio gracias al cultivo de cereales -salvo arroz- y leguminosas varias. De la misma manera, los balances financieros salen siempre en verde. ¿La receta? Trabajo, constancia y buen olfato para los negocios.
Aunque nació en Madrid, el mayor de los Rivera considera a Sevilla como su casa. Fue en su otra tierra donde logró una de las victorias con mejor sabor durante estos cincuenta años. Recurriendo al socorrido lenguaje taurino, Francisco Rivera salió por la puerta grande de su conflicto empresarial con Sergio Ramos. Torero y futbolista pleitearon durante ocho años por la concesión del mercado sevillano La Nave del Barranco. La batalla judicial comenzó en el año 2012 cuando el Ayuntamiento de Sevilla, dirigido en aquel momento por el mencionado Zoido, adjudicó por 25 años la gestión de el antiguo mercado de abastos a la UTE ‘Lonja del Barranco’ a la que pertenece el diestro y el periodista Carlos Herrera, entre otros socios. La empresa del marido de Pilar Rubio, Sermos 32 S.L, trató de anular la adjudicación al considerar que la empresa de Francisco Rivera no cumplía con los requisitos solicitados por el Consistorio para lograr la cesión del lugar.
Nunca es agradable pelear en los tribunales pero Francisco Rivera salió victorioso una vez más. La moneda salió cara, igual que recientemente, cuando ha considerado necesario aumentar su exposición pública y conceder una entrevista a De Viernes en la que repasó su intensa y mediática vida. Sin filtros, sin tapujos y de frente, tal y como toreaba, tal y cómo es él.