Fernando Tejero, al desnudo con Bertín Osborne: "El año que viene quiero ser padre soltero"
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Este miércoles Bertín Osborne ha visitado la urbanización de vecinos más conocida de España, Mirador de Montepinar. El programa ‘Mi casa es la tuya’ ha charlado con algunos de los actores principales de la afamada serie de Telecinco y ha descubierto la vida que se esconde tras los estereotipos de los personajes. Nacho Guerreros, Pablo Chiapella, Vanesa Romero, Fernando Tejero y Jordi Sánchez, entre otros, se han desenfundado el traje artístico dándole permiso a Bertín Osborne para que bucee en sus emociones, sus comienzos y en las luces y sombras de su vida real.
Detrás de las risas siempre hay sombras. La interpretación cura muchas heridas, según Fernando Tejero. Su vida no ha sido fácil. Se ha enfrentado a situaciones emocionales complejas desde pequeño que han forjado una personalidad a caballo entre la ternura y la necesidad de ayuda psicológica. Pese a los difíciles pasajes que han protagonizado su vida, Fernando tiene una ilusión rayando casi la obsesión: ser padre. Conserva la esperanza de que algún día alguien lo llame papá. «Tengo muchas ganas y del año que viene no pasa que me convierta en padre. Lo seré soltero, me hace mucha ilusión», ha confesado.
Cordobés, siempre rodeado de cinco hermanos, su infancia fue atípica. A los 14 años su madre fue operada de apendicitis, un hecho que supuso un maremoto para el joven.
En ese tiempo, Fernando se fue a vivir con sus tíos y primos. Lo que se entendía como una visita de días, se convirtió de años: «No sabría decir cuándo mi tía se convirtió en madre. Ejerció de madre, aunque yo tengo la mía. En ese tiempo me acostumbré a esa familia y creía que mi prima era mi hermana y mis tíos, mis padres».
Sin percatarse, se fue alejando de sus padres y hermanos hasta que se convirtieron en unos extraños para él: «Viviendo en la misma ciudad los veía en ocasiones puntuales, como en Navidad y cumpleaños». Su tía falleció de cáncer y algo se le fue con ella al actor: «Dejó un gran vacío y me quedé con mi tío y mi prima para siempre». Tejero deja claro en ‘Mi casa es la tuya’ que no le guarda ningún rencor a sus padres por la falta de atención: «Me hizo daño su actitud, pero a día de hoy me llevo bien con ellos».
Estas carencias afectivas lo han llevado a necesitar ayuda psicológica en diferentes momentos de su vida. Especialmente vulnerable se confiesa ante las redes sociales: «Hasta hace nada me afectaba todo. He llegado a pensar que no valgo para ser actor. Nunca he entendido por qué alguien en las redes sociales pedía mi muerte. Ahora soy más fuerte». Fernando asegura estar lleno de amor, aunque nunca ha tenido buena suerte con él: «Con mi expareja me llevo bien, pero lo dejamos hace unos meses».
Nacho Guerreros y Vanesa Romero, dos adolescentes que sufrieron acoso escolar
Nacho Guerreros confiesa que a veces le cuesta ser él mismo y quitarse la máscara de Coque, el conserje de ‘La que se avecina’. Este riojano siempre quiso ser actor: «Recuerdo a Kiko Ledgard en el programa ‘1, 2,3 responda otra vez’. Veía la televisión como una escuela». Decidió ser actor por una causa dramática. «Cuando acabé la EGB se me daba muy bien dibujar y, aunque no me gustaba, mis padres se empeñaron en que lo estudiara. En ese tiempo sufrí bullying, lo pasé fatal», ha asegurado Nacho.
El mundo de la interpretación tocó a su puerta en el momento idóneo: «En mi casa lo tomaron como una bomba, nadie me entendió». A su llegada a Madrid recuerda los seis años que trabajó con personas discapacitadas. De esa etapa extrajo lecciones vitales: «Ellos se toman la vida con el humor que nos falta a nosotros». Con un hijo de 15 años y su perro, su vida es tranquila y «huraña».
Por su parte, Vanesa Romero también sufrió acoso escolar: «Tuve una vida imposible en el colegio. Me trataban fatal y cuando eres pequeño no entiendes por qué no encajas. Me cambiaron dos veces de colegio, sin suerte». Su válvula de escape la encontró en el deporte, se convirtió en atleta profesional y ganó varios trofeos en Valencia. Divorciada, pareja de un músico, asegura estar viviendo una buena etapa personal en la que no descarta tener hijos pronto.
Pocos seguidores de la serie saben que el actor Jordi Sánchez, el amoral Antonio Recio, estudió enfermería y tiene dos hijos, uno biológico y otro adoptado. El alocado Amador Rivas, Pablo Chiapella, formó su familia entre bambalinas de la serie. Conoció a Natalia, la chica de maquillaje, de la que se enamoró y tuvo una hija hace año y medio.