Así es Guillermo Furiase, el exmarido de Lolita y padre de sus dos hijos
Lolita Flores ha estado casada únicamente en dos ocasiones: con Pablo Durán y con Guillermo Furiase
Guillermo desempeñó el papel de manager para Antonio Flores, su cuñado
Lolita Flores ha estado casada únicamente en dos ocasiones: con Pablo Durán y con Guillermo Furiase. Este último es el padre de sus dos hijos, Elena y Guillermo. A pesar de que la hija de la cantante terminó su relación con el padre de los primogénitos, ha mantenido un buen vínculo con ellos. Uno de los momentos que pasarán a la historia de la familia Flores fue cuando la joven acudió el día de su boda, acompañada en su camino al altar por una de las personas más significativas en su vida: su padre, Guillermo. Sin embargo, han sido muy pocas las ocasiones en las que se ha podido ver públicamente al que fue manager de Antonio Flores, el 19 de marzo, Elena le mandó un emotivo mensaje felicitando a su padre. Pero, ¿qué ha sido de Guillermo Furiase?
Guillermo desempeñó el papel de manager para Antonio Flores, su cuñado, durante un período relevante. Estuvo a cargo de la carrera musical del cantante hasta su trágico fallecimiento el 30 de mayo de 1996. Tras este evento, comenzó a gestionar la incipiente carrera como actriz de su hija, Elena Furiase. Durante principios de los años 2000, la hija de Lolitas Flores logró asegurar sus primeros papeles importantes, catapultándola hacia el estrellato. Aunque en el año 2011 decidieron terminar su relación profesional, esto no afectó su relación personal.
Algo que no hizo que Guillermo y Elena dejaran mantener una excelente relación, demostrando que su vínculo va más allá del ámbito profesional. A pesar de haberse separado en lo profesional, su estrecho lazo familiar perdura, mostrando que el cariño y el respeto mutuo siguen siendo fundamentales en su relación.
Uno de los momentos más desafiantes en la vida de Guillermo llegó el 10 de enero de 2015, cuando sufrió un grave infarto cerebral, marcando un punto crítico en su existencia. Para ese entonces, el argentino ya se había retirado del foco mediático y se encontraba en un período de relativa tranquilidad. Durante meses, atravesó un proceso de recuperación en el hogar de su exmujer, buscando apoyo y cuidados en un entorno familiar.
Sin embargo, a medida que avanzaba su proceso de rehabilitación, Guillermo empezó a redescubrir la vida de una manera renovada. Actualmente, parece estar disfrutando de una nueva etapa en la que valora aún más los pequeños momentos de felicidad y la compañía de sus seres queridos. Ha encontrado una fuente de alegría en la presencia de sus dos hijos, con quienes comparte momentos significativos y memorables. Además, su nieto Noah se ha convertido en una luz en su vida, siendo frecuente verlos juntos compartiendo risas y complicidad.
La boda de Elena, su hija, fue otro momento destacado en la vida de Guillermo. Experimentó una mezcla de emociones al acompañarla al altar, sintiendo un profundo orgullo y gratitud por ser parte de ese momento especial en la vida de su hija. Este acontecimiento fortaleció aún más los lazos familiares y dejó una huella indeleble en su corazón.