Anne Igartiburu en crisis: fin de la convivencia con Pablo Heras-Casado tras cinco años casados
La presentadora está volcada en sus hijos y en su nuevo trabajo como coach
Fue la otra gran protagonista de las Campanadas de la 1. Anne Igartiburu estuvo en un segundo plano cediéndole todo el protagonismo a su compañera, Ana Obregón, que volvía a ponerse frente a una cámara siete meses después de perder a su hijo. Pero según publica en exclusiva la revista LECTURAS esta semana, la presentadora vasca también estaba atravesando un momento complicado en su vida. Y es que su matrimonio con el director de orquesta Pablo Heras-Casado, estaba pasando por una grave crisis. De hecho, esta última noche del 2020, y por primera vez desde que se casaron, el músico no acompañaba a su mujer en una velada tan especial.
La situación era tal, que la pareja ya no convivía en el mismo domicilio. Al parecer Heras-Casado ya se había mudado a una vivienda en pleno centro de la capital, a escasos minutos del Teatro Real donde trabaja. Han sido seis años de amor, cinco de matrimonio y un hijo en común, Nicolás, que llegó al mundo el 5 de junio de 2016, pero cuyo nacimiento no se conoció hasta una semana después cuando sus felices papás presumieron de bebé en sus redes sociales. La discreción ha sido siempre la seña de identidad de la comunicadora y por ende de su marido. De hecho, su boda civil se celebró en Elorrio, el pueblo natal de Igartiburu, en la más estricta intimidad.
LECTURAS desvela que el pasado 4 de diciembre Pablo y Anne llegaron juntos al domicilio de la presentadora en la zona norte de Madrid y la tristeza en su rostros era palpable. No ha sido un año fácil para la conductora de ‘Corazón’. Después de 20 años al frente del programa diario, la pandemia hizo que su emisión sufriera un parón, tras lo que se decidió moverlo al fin de semana. Y ahora está centrada en el coaching. Hace cinco años realizó el Máster en Experto Internacional en Coaching, en el Instituto Europeo del Coaching y da clases en un portal de internet especializado en desarrollo personal.
No se sabe si esta crisis será una separación definitiva o un bache que terminarán superando. Pero mientras tanto, Pablo Heras-Casado está volcado también en su trabajo mientras se amolda a su nueva vida de soltero. Se le suele ver paseando por el Madrid de los Austrias donde tiene su nueva residencia. A veces acude a los ensayos en el Teatro Real caminando o en patinete eléctrico, y también se le ha podido ver compartiendo tertulia con otros compañeros de profesión en las cafeterías de la zona.
Su historia de amor
Lo suyo fue un flechazo. El músico acudió a un programa de radio donde Anne fue la encargada de entrevistarle. Y allí empezó todo. Corría el año 2014 y fue la propia presentadora quien desveló, en el programa de Bertín Osborne, cómo se enamoró de su segundo marido: «Él dirigía el concierto para chelo de Haydn, que fue el primer disco que me regalaron mis padres con un año. Y entre Haydn, la música clásica, el auditorio…Pum, caímos rendidos». Se casaron en secreto el 30 de noviembre de 2015, y a su boda solo acudieron varios testigos.
En junio de 2016 Anne dio a luz a su primer hijo biológico, que llegaba para convertirla en mamá de familia numerosa. Además del pequeño, la presentadora es madre adoptiva de dos niñas: Noa, nacida en el 2001 en la India, y Carmen, una niña vietnamita que nació en 2011 y a la que adoptó en el año 2013. «He sido madre de acogida, madre adoptante y madre biológica. Y también madrastra de cualquiera que se me pone por el medio», dijo en su día. Días antes de despedir el año, Anne Igartiburu declaraba en El País: «He amado y me han amado mucho, y me lo han demostrado».