Los 85 años de Andrés Pajares: tres grandes amores, una hija secreta y un retiro alejado del foco

No todo el mundo tiene la suerte de llegar a los 85 años, pero Andrés Pajares lo ha logrado. Tras una vida llena de risas, éxitos y ciertos retos, este 6 de abril celebra un año más. Hoy, disfruta de una jubilación tranquila, alejado del ruido mediático y al lado de su esposa, Juana Gil, una mujer 30 años menor que él, quien ha sido su gran apoyo desde que se conocieron en 2016, cuando ella trabajaba como su secretaria. En 2019, decidieron dar el paso y casarse en una ceremonia secreta, rodeados de unos pocos testigos, lo que refleja la discreción con la que el intérprete ha llevado su vida en los últimos años. Juntos han construido una relación sólida que le ha aportado la estabilidad y alegría que tanto necesitaba, a pesar de los achaques de la edad, como los problemas de espalda y su diagnóstico de trastorno bipolar mixto, que no han mermado su carisma ni su energía.

Aunque ya no se le ve tanto en público, aún hace alguna aparición en eventos especiales, especialmente cuando se trata de apoyar a algún buen amigo. Su carrera, que comenzó cuando tenía apenas 17 años, le permitió convertirse en uno de los actores más queridos. Durante las décadas de los 70 y 80, formó junto a Fernando Esteso uno de los dúos más míticos de la comedia, protagonizando películas que siguen siendo recordadas con cariño, como Los bingueros (1979), El liguero mágico (1980) y Agítese antes de usarla (1983), comedias que no solo amasaron grandes fortunas, sino que también marcaron una época dorada del cine español, desafiando la popularidad de otros géneros como el «landismo» de Alfredo Landa.

En 1990, alcanzó un hito en su carrera con su interpretación en ¡Ay Carmela!, dirigida por Carlos Saura, que no solo le valió el reconocimiento de la crítica, sino que también le otorgó el Goya al Mejor Actor.

Tres mujeres y una hija secreta

Su primer amor fue Maby, con quien se conoció en 1957, cuando él tenía solo 17 años. Juntos formaron una pareja artística que recorrió España y, en 1968, dio a luz a su primer hijo, Andrés. En su biografía Andrés Pajares: Mis memorias… antes de que se me olviden (2020), él la describe como «un ser humano realmente extraordinario», destacando su bondad y su dedicación a la familia. Ella falleció prematuramente a los 33 años, víctima de un cáncer de pulmón y una infección ósea.

Después llegó Asunción Alonso, conocida como Chonchi, con quien se casó en 1975 y tuvo una hija, Mari Cielo Pajares. Sin embargo, esta relación estuvo marcada por tensiones y conflictos. Mari Cielo llegó a declarar que su hogar se convirtió en una «pesadilla» de la que tuvo que escapar para sobrevivir. Además, Andrésito, su hijo mayor, relató en diversas entrevistas cómo la convivencia con Chonchi fue difícil, describiendo maltratos psicológicos y una actitud despectiva hacia él, lo que finalmente llevó a la ruptura de la pareja en 2003. Ese mismo año, el actor reveló la existencia de Eva, una hija secreta fruto de una relación que tuvo con una joven en Mallorca.

Años después, tal y como hemos contado, encontró la estabilidad emocional en Juana Gil. Ella ha sido la persona que lo ha cuidado y querido cuando su familia no estaba cerca, ofreciéndole el cariño y la tranquilidad que necesitaba en los últimos años. Juntos, han compartido una vida apartada del ojo público, viviendo una historia de amor de puertas para adentro.