El comité que investiga el asalto al Capitolio pide procesar a Trump por incitar a la insurrección

El comité de la Cámara de Representantes que investiga el ataque al Capitolio de Estados Unidos del 6 de enero de 2021 ha recomendado presentar cargos penales contra el ex presidente Donald Trump. Por unanimidad, el comité sugiere al departamento de Justicia acusar a Trump de incitación a la insurrección, obstrucción de un procedimiento oficial, conspiración para defraudar al gobierno y hacer declaraciones falsas.

Como punto final a una de las investigaciones más exhaustivas y minuciosas del Congreso que se recuerdan, los siete demócratas y dos republicanos del comité recomiendan cargos penales contra Trump y el equipo que le ayudó a lanzar una campaña de presión en diferentes niveles para tratar de anular su derrota en las elecciones presidenciales de 2020, que ganó el actual presidente de Estados Unidos Joe Biden.

Aunque la recomendación del comité del Congreso es sobre todo simbólica, ya que el departamento de Justicia debe decidir si procesa a Trump, las conclusiones de la investigación son esclarecedoras.

El presidente del comité Bennie Thompson, demócrata de Mississippi, ha indicado que el sistema de justicia penal puede proporcionar responsabilidad, y ha agregado: «Tenemos plena confianza en que el trabajo de este comité ayudará a proporcionar una hoja de ruta hacia la justicia».

Thompson ha indicado que Trump «rompió la fe» que la gente tiene cuando acude a las urnas en una democracia. «Perdió las elecciones de 2020 y lo sabía», ha recordado Thompson. «Pero eligió intentar quedarse en el cargo a través de un plan elaborado para anular los resultados y bloquear la transferencia de poder», ha insistido.

La representante republicana de Wyoming Liz Cheney, vicepresidenta republicana del panel e hija del vicepresidente Dick Cheney con George W. Bush, ha indicado en su discurso de apertura que todos los presidentes de la historia de Estados Unidos han defendido el traspaso ordenado de poderes, «excepto uno».

A pesar de que la mayoría de las principales conclusiones del informe no son nuevas, en conjunto representa uno de los retratos de mayor condena de un presidente estadounidense en la historia reciente. Tanto si es procesado como si no, el panel expone con gran detalle el amplio esfuerzo de Trump por anular su propia derrota y lo que, según los legisladores, es su responsabilidad directa en la insurrección de sus partidarios.

El ataque del 6 de enero de 2021 se produjo después de semanas de esfuerzos de Trump por anular su derrota, una campaña que fue ampliamente detallada por el comité en sus múltiples audiencias públicas, y expuesta de nuevo por los legisladores del panel el lunes. Gran parte de los antiguos ayudantes de Trump han testificado sobre su presión sin precedentes sobre los estados, sobre los funcionarios federales y sobre el vicepresidente Mike Pence para encontrar una manera de frustrar la voluntad popular. El comité también ha descrito con gran detalle cómo Trump instigó a la multitud en un mitin esa mañana, y después apenas se esforzó en detener a sus seguidores horas mientras veía cómo se desarrollaba la violencia en la televisión.