El PSOE se olvida de sus muertos tras enumerar Abascal todos los asesinados por ETA: ningún aplauso

Ningún diputado del PSOE ha aplaudido a Santiago Abascal tras citar el presidente de Vox, uno a uno, el nombre de todas y cada una de las más de 800 víctimas de ETA. Abascal ha destacado al citar alguno de los casos que era «militante del PSOE». La bancada del Grupo Socialista estaba igual de llena que por la mañana, pero los escaños azules del Gobierno estaban por la tarde prácticamente vacíos. Apenas tres ministros: los de Cultura, Trabajo y Función Pública. La de Trabajo, Yolanda Díaz, ha abandonado el Hemiciclo a los pocos minutos. Ni Pedro Sánchez ni Pablo Iglesias asisten a la sesión vespertina. Tampoco Pablo Casado. Nadie, entre los ministros o los diputados del PSOE presentes, ha aplaudido la intervención de Abascal.

Santiago Abascal, en un gesto inédito en la Cámara Baja, ha leído uno por uno el nombre de todas las personas asesinadas por ETA. El largo rosario de víctimas ha empezado por Melitón Manzanas en 1968. Abascal ha empleado 30 minutos en poder dar todos los nombres. Ha ocupado todo el tiempo de su respuesta a la portavoz de EH Bildu, Mertxe Aizpurúa. Abascal ha ido recordando a aquellas personas que él mismo conoció y, al citar a Miguel Ángel Blanco, ha destacado que el 60% de los jóvenes españoles de hoy no saben quién es.

Los diputados de EH Bildu han escuchado sin hacer gestos ni comentarios la larga lista de asesinados. Igual que los diputados del Grupo Socialista, teniendo en cuenta que algunos de los nombres que ha citado Abascal fue  compañero de partido de algunos de los diputados socialistas presentes hoy en el hemiciclo de la Carrera de San Jerónimo. El grupo capitaneado por Adriana Lastra ni se ha inmutado durante el largo aplauso de los diputados de Vox y de algunos de los diputados del Partido Popular.  La propia Lastra, presente en su escaño, ha colgado un tuit mientras Abascal aún citaba a los asesinados de los años 80. A Adriana Lastra, la lectura de las víctimas de ETA le ha parecido una película.

Abascal está copiando los últimos 5 minutos de la película de Sorkin sobre los Chicago 7 leyendo los nombres de las víctimas como hizo Tom Hayden.
Trata a las víctimas como materia de un guión cinematográfico.

— Adriana Lastra (@Adrilastra) October 21, 2020

La bancada del PP también estaba semivacía, empezado por Pablo Casado, ausente en la sesión de tarde, como Pedro Sánchez. En su escaño está sentado Mario Garcés, que, en señal de respeto, ha puesto su mano en el corazón mientras escuchaba a Abascal. Así la ha mantenido, como señal de rechazo en este caso, al volver a subir el portavoz de EH Bildu, Oskar Matute, a la tribuna.

El único miembro del PSOE que ha tenido un gesto durante la intervención de Santiago Abascal ha sido el socialista catalán José Zaragoza. El ex secretario de Organización del PSC ha negado con la cabeza cuando Abascal ha recordado a dos de las víctimas que fueron fulminadas frente a la sede de la agrupación catalana del PSOE.

Los diputados del PSOE no se han sumado al homenaje de Abascal a las víctimas de ETA. Los del PP han mostrado desconcierto al terminar Abascal el largo rosario de asesinados. El golpe de efecto del presidente de Vox les ha pillado por sorpresa. Unos han aplaudido. Otros, no. Entre las filas populares, Teresa Jiménez-Becerril, cuyo hermano y su cuñada fueron asesinados en 1998 en Sevilla dejando huérfanos a sus hijos de corta edad. Esta mañana, Jiménez-Becerril ha saltado y ha gritado «¡mentira!» cuando el presidente Pedro Sánchez ha presumido de que la derrota de ETA se había producido durante el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero y el PSOE.

Treinta minutos de nombres después, con la voz algo rota, Abascal ha terminado. Los 52 de Vox, que habían seguido de pie la intervención de su líder, le han aplaudido durante varios minutos. En la bancada del PSOE, silencio y miradas evasivas.