Podemos pagó 72.600 € de comisión a la tía de Iglesias por intermediar en la compra de la nueva sede

Podemos pagó a la tía de Pablo Iglesias, Paloma Pérez-Marín Turrión, una comisión de 72.600 euros por intermediar en la compra de la nueva sede del partido en la calle Francisco Villaespesa 18 de Madrid. Este familiar del vicepresidente del Gobierno tiene una empresa inmobiliaria que opera en la capital y en Almería. Fuentes internas del partido morado afirmaron a OKDIARIO que se trata de una de las tantas cacicadas del líder podemita en la gestión del partido.

OKDIARIO ha tenido acceso al contrato firmado por Podemos para encubrir este acuerdo que tenía un fin lucrativo. El documento fue rubricado el 2 de abril de 2018, el mismo día en el que la formación morada adquirió la macrosede al grupo hotelero Transhotel por 2.253.000 euros pagados al contado, una cifra que hasta el momento no se conocía con exactitud. La empresa propietaria del edificio entró en quiebra en 2014.

Opacidad en el contrato

En el contrato, que consta de dos folios, se acuerda «el pago de los honorarios profesionales de intermediación de la Agente de la Propiedad Inmobiliaria doña Paloma Pérez-Marín por importe de 60.000 euros más el 21% de IVA (12.600), que suman un total de 72.600 euros. Iglesias intenta ocultar los lazos que le unen a esta abogada escondiendo el segundo apellido de la agente de la propiedad inmobiliaria aprovechando que el primero es compuesto. De esta manera, resultaría más complejo averiguar el parentesco entre ambos.

Pero este periódico ha podido comprobar que el segundo apellido de la agente inmobiliaria, que tiene sus oficinas en la calle O’Donnell de Madrid, es Turrión. Además, fuentes cercanas a la familia de Iglesias confirman a OKDIARIO que Paloma Pérez-Marín Turrión es familiar del vicepresidente segundo del Gobierno. Se trata de una prima hermana de su madre María Luisa Turrión Santa María.

La madre de Paloma Pérez-Marín Turrión es hermana del abuelo de Iglesias, el histórico líder del PSOE Manuel Turrión de Eusebio. Asimismo, Ángela Turrión de Eusebio aparece en alguna de las sociedades de su hija Paloma ocupando el cargo de consejera, según refleja el Boletín Oficial del Registro Mercantil (BORME).

El objetivo del vicepresidente del Gobierno era claro: esconder esta comisión que se embolsó su tía segunda gracias a la compra de la sede de Podemos. Según consta en el contrato, Podemos acordaba abonar al familiar de Pablo Iglesias la cuantía de 72.600 euros en un cheque con número 0.126.695 «contra la entidad Triodos Bank», donde Podemos tiene una de sus cuentas. El pago, al igual que los más de dos millones que costó la sede del edificio, se realizó a tocateja.

Dos presuntos delitos

Pablo Iglesias podría haber cometido un delito de administración desleal a través de este convenio de nula ética por el que se acuerda una comisión para un familiar. El artículo 252 del Código Penal dice que: «Serán punibles los que, teniendo facultades para administrar un patrimonio ajeno, emanadas de la ley, encomendadas por la autoridad o asumidas mediante un negocio jurídico, las infrinjan excediéndose en el ejercicio de las mismas y, de esa manera, causen un perjuicio al patrimonio administrado».

Además, el líder de Podemos ha quebrantado el código ético del partido. El mismo establece que la formación morada es «una plataforma que garantiza que la política deja de ser una actividad al servicio de los intereses privados».

El punto XI, en el apartado D, recoge que todos los cargos electos y todos los cargos internos de Podemos deben aceptar: «El compromiso de inhibirse en la toma de decisiones y de abstenerse de optar a cargos electos con el objetivo de representar intereses personales, económicos o políticos ajenos a los que correspondan en cada caso al cargo en cuestión».

En este caso, según fuentes consultadas por OKDIARIO, es evidente que Iglesias «incumplió todo lo que se podía incumplir: ordenó una compra –que no era la más ventajosa– para beneficiar los intereses personales de su familia».

La pareja de Gloria Elizo

En el contrato aparece la rúbrica de Pablo Fernández Alarcón en representación de Podemos como gerente del partido político. Éste es muy próximo a Pablo Iglesias, además de ser pareja de la vicepresidenta tercera del Congreso, Gloria Elizo, que dentro del partido ostenta varios cargos: responsable de Recursos Humanos y gerente de la formación morada, miembro del Consejo Ciudadano Estatal y responsable de las áreas de Anticorrupción, Regeneración Democrática y Administración Pública.

Fernández Alarcón está implicado en el presunto fraude de la falsa asociación contra el cáncer infantil Linceci, que utilizaba las donaciones de miles de españoles para pagar los sueldos y los coches de alta gama de una trama criminal que ha estafado 5,5 millones de euros.

El cerebro de la estafa de Linceci, Roberto Pérez Rodríguez, pagó un viaje a Perú al de Podemos con el objetivo de montar un ‘call center’ en el país iberoamericano, similar a uno que ya estaba instalado en Zaragoza. El proyecto no salió adelante. La Policía intervino varias conversaciones en las que el cabecilla del fraude se refiere a Fernández Alarcón como «el político de Podemos», debido a que no llega a recordar su nombre.

Cero en transparencia

El documento, al que ha tenido acceso OKDIARIO, no ha sido publicado en el portal de transparencia que lleva sin actualizar desde el 31 de diciembre de 2017 pese a que la formación morada presume de ofrecer «claridad en su contabilidad» y lo presenta como una de las virtudes que le diferencian de los otros partidos. Pero la realidad es totalmente distinta. El portal de transparencia lleva dos años y medios sin publicar en qué gasta su dinero y de dónde provienen sus ingresos.

En los primeros años, en el que este portal de transparencia tenía mayor actividad, los ciudadanos podían descargarse las facturas que justificaban en qué empleaba el dinero la formación morada. Sin embargo, ahora estos datos están desactualizados pese a que el partido, además de las subvenciones públicas en función de su representación parlamentaria, se financia a través de donaciones privadas divididas en colaboraciones periódicas de los militantes, crowfunding, microcréditos y con los beneficios de su tienda.

El cuartel general

Podemos ha estrenado este viernes su nuevo cuartel general: una macrosede recién reformada en el distrito madrileño de Ciudad Lineal. El edificio cuenta con una superficie de parcela de 662 metros cuadrados y 2.179 metros construidos, que se han aumentado en 2.193,78 metros tras la reforma, distribuidos en: una planta sótano con uso de garaje, planta baja, entreplanta, primera y segunda planta.

La sede se ha sometido a una completa remodelación que iba a suponer un coste de 649.936,68 euros. Sin embargo, después de adjudicarse de manera irregular las obras de adecuación del edificio el sobrecoste aumentó a 1.361.055 euros, más del doble de la cuantía inicial.

Este viernes Pablo Iglesias e Irene Montero presidieron la primera reunión de la Ejecutiva de Podemos en estas nuevas instalaciones. Seis años después de que Podemos se constituyese como partido han dejado atrás el pequeño local en el barrio de Lavapiés y las oficinas en la calle Princesa.