Sánchez salva los Presupuestos ​con sus cesiones a los golpistas catalanes y los separatistas vascos

• Segundo Sanz @SegundoSanz
• Información política, PP, Congreso y Senado
• • 29/10/2021 14:05
  • Actualizado: 29/10/2021 16:00

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, tiene encarrilados los Presupuestos Generales del Estado para 2022 gracias a sus socios nacionalistas, separatistas y proetarras, que anunciaron este viernes que no presentan enmiendas a la totalidad a tales cuentas, el primer y gran escollo de su tramitación parlamentaria.

El portavoz del PNV en el Congreso, Aitor Esteban, ha informado en rueda de prensa de haber alcanzado un acuerdo con el Ejecutivo socialcomunista para la cesión «íntegra» al País Vasco de la gestión del Ingreso Mínimo Vital (IMV) y se ha mostrado «optimista» sobre alcanzar más pactos con el Gobierno de Sánchez en materia de inversión, infraestructuras y digitalización durante la fase de enmiendas parciales.

Por su parte, Esquerra Republicana ha conseguido «blindar una cuota de producción en catalán» en la nueva Ley Audiovisual, principal exigencia para no vetar las cuentas del Gobierno junto a la cesión del Ingreso Mínimo Vital como en el País Vasco, compromiso que también ha adquirido el Ejecutivo, según ha explicado el portavoz Gabriel Rufián.

En cuanto a Bildu, los proetarras ya anunciaron que no iban a presentar enmienda a la totalidad y este viernes subrayaron que «las negociaciones van en una buena marcha» de cara a las enmiendas parciales. Los batasunos han negado que exista detrás un pacto con Moncloa sobre beneficios penitenciarios para los presos de ETA, si bien las palabras de Arnaldo Otegi en un foro interno han sido reveladoras: «Si para sacar a 200 presos hay que votar los Presupuestos, los votaremos», manifestó.

Siete enmiendas

En cambio, quienes sí han registrado enmiendas a la totalidad son PP, Vox, Ciudadanos, Junts, CUP, Foro Asturias y Coalición Canaria. Tales enmiendas se debatirán y votarán los próximos miércoles y jueves en la Cámara baja.

En el caso de Junts, que ya votaron en contra de la investidura de Sánchez, acusaron el jueves al Gobierno de Sánchez de estar «apalancado en el inmovilismo y no dar garantías de cumplimiento» al independentismo catalán. Su portavoz en el Congreso, Miriam Nogueras, dijo que su grupo había pedido «hasta tres veces» un encuentro con ERC para coordinar sus acciones en el Congreso, sin que se produjera. Nogueras emplazó a ERC a presentar su propia enmienda a la totalidad y remarcó que, según las cifras de la patronal catalana, el Estado tiene una deuda con Cataluña de 28.000 millones de euros. «De cada 100 euros que tienen que venir a Cataluña solo llegan 66», esgrimió la portavoz separatista.

En la víspera, Pedro Sánchez había pedido «responsabilidad» a sus socios de la mayoría Frankenstein y les había instado a poner por delante la «consolidación de la recuperación justa del país», apoyando los Presupuestos Generales del Estado de 2022.

«Lo que es evidente es que ahora mismo la ciudadanía lo que está reclamando al conjunto de la política en España es estabilidad y avances sociales», señaló Sánchez el jueves en rueda de prensa junto al primer ministro de la República Portuguesa, António Costa, en el marco de la XXXI Cumbre Hispano-Portuguesa que se celebró en Trujillo (Cáceres).