La lava del volcán de La Palma llega al mar por el acantilado de ‘Los Guirres’

• Joan Guirado @joanguirado
• LA PALMA
• Enviado especial
• Corresponsal de Gobierno y Casa Real. Siguiendo la actividad del presidente y líder del PSOE, Pedro Sánchez, y del Rey de España. También política catalana.
• • 29/09/2021 01:03
  • Actualizado: 29/09/2021 10:12

Nueve días después de entrar en erupción la lava del volcán Cumbre Vieja ha llegado al mar. Lo ha hecho una semana más tarde de las primeras previsiones del Gobierno canario, que apuntaban al pasado lunes por la tarde. Una de las coladas de lava se ha precipitado finalmente al mar durante la medianoche del martes al miércoles. Lo ha hecho por el acantilado de ‘Los Guirres’, en la costa de la localidad de Tazacorte.

La lava ha ido cayendo de forma lenta y lo único que se ha podido ver a lo lejos son piedras candentes que caen al mar, según la retransmisión que realiza la Televisión Canaria desde un barco y las imágenes facilitadas desde el buque del Instituto Español de Oceanografía Ramón Margalef. La oscuridad de la noche no permite ver las columnas de vapor de agua que supuestamente se han debido formar por el choque térmico de la lava con el mar, columnas que llevan unos gases que pueden resultar tóxicas para los ojos, los pulmones y la piel pero sí se constata un humo negro.

Este lunes, el volcán entró en una fase más explosiva, tras un día sin apenas expulsar lava y ceniza, que ha sido determinante para empujar la colada que avanzaba a pocos metros hacia la costa. Lo ha hecho a mucha velocidad. Este nuevo río es mucho más líquido que los anteriores, fruto de la mezcla con el agua de los acuíferos. Eso ha provocado que la columna que iba descendiendo desde el pasado domingo se reactivase por completo. La costa de Tazacorte, cuyos vecinos fueron desalojados este domingo, ante el peligro que puede suponer la nube tóxica que se genera por el contacto del magma con el agua, ha sido el destino final de la lava.

Riesgo para la población

Cuando la lava llega al mar se va enfriando paulatinamente el fluido caliente provocando la emisión de una mezcla de vapor y gases a la superficie, para terminar sedimentando y formando parte de la propia tierra. Esos vapores y gases son un riesgo para la población, que ya ha sido confinada en un radio de 5 kilómetros del lugar por el que la colada ha accedido al océano atlántico.

Según los expertos, al entrar en contacto el magma con el agua salada, provoca una reacción química que aviva un humo intenso que lanza a la atmósfera partículas muy finas de ácido clorhídrico y de vidrio, que pueden llegar a irritar la piel y los ojos o incluso causar problemas respiratorios.

Sin aviones de forma indefinida

Aunque AENA reabrió el aeropuerto de La Palma este domingo las aerolíneas han preferido mantener sus operaciones suspendidas. La canaria Binter intentó reanudar sus vuelos el lunes al mediodía pero tras el primer intentó volvió a cancelarlos. La compañía alegó que no se reunían los requisitos de seguridad necesarios para despegar o aterrizar del aeródromo de La Palma.

Para este martes la situación se espera que sea igual, pese a los intentos para reconducir la situación. Ni Iberia, ni Binter, ni CanaryFly ni Vueling, las compañías que operan en el aeropuerto palmero, tienen previsto reanudar sus viajes. La lowcost catalana Vueling, a última hora del lunes, fue la última en suspender su vuelo que tenía previsto salir de Barcelona a primera hora de la mañana del martes. Iberia, Binter y CanaryFly ya no comercializaban billetes desde la mañana del lunes. Las empresas aeronáuticas volverán a analizar la situación al mediodía.