La juez absolvió a la familia de la mujer de Lorenzo que los llamó “asesinos” en el funeral de su tía

El escándalo se recuerda todavía en Grado (Asturias). Era el 29 de junio de 2021 cuando Luis Lorenzo y su mujer Aránzazu Arancha Suárez se encontraban en la terraza de una cafetería de esta localidad asturiana, muy cerca del Juzgado. Aquel día se celebraba el funeral de Isabel Suárez Arias, vecina de Grado, fallecida a los 85 años en casa de su sobrina Aránzazu y el marido de ésta, Luis Lorenzo. Una muerte por la que ambos están acusados ahora de asesinato por un Juzgado de Arganda del Rey. Al lugar llegaron varios familiares de la anciana fallecida. Ambas partes discutieron y el asunto acabó en denuncia por insultos, agresiones y coacciones del actor Luis Lorenzo contra tres familiares de su esposa.

El juicio se celebró en octubre de 2021, en concreto en el Juzgado número 1 de Grado y la sentencia se dictó el 17 de diciembre del mismo año. La juez acabó absolviendo a la familia de la mujer de Lorenzo, Aránzazu, a la que acusaba de llamarlos “asesinos” el día del funeral de Isabel y en concreto a una de las cuñadas de la fallecida de «golpear repetidamente con la muleta al denunciante (Luis Lorenzo) en el brazo». La pareja también denunció a uno de los primos de Aránzazu de «impedirles el acceso al Juzgado, en especial el denunciado (…), que efectuaba todo tipo de aspavientos delante de la puerta de acceso».

La denunciada por agresión, cuñada de la fallecida, explicó durante el juicio que ella sólo había dicho al actor «dónde está mi cuñada», en referencia a la fallecida Isabel Suárez, «bajo el cuidado de la esposa del denunciante, negando haberle golpeado, pues, según refiere ni siquiera llegaron a salir de la terraza de la cafetería». Otra familiar denunciada, prima de Aránzazu, declaró en el juicio que «al haberse enterado momentos antes que su tía había fallecido, cuando llegó su prima, Aránzazu le preguntó ¿por qué no me dejaste hablar con mi tía?».

Enemistad manifiesta

Para tratar de probar la agresión, el actor Luis Lorenzo presentó un parte de lesiones, «emitido unas cinco horas después del incidente e informe forense», pero según la sentencia «ninguno de los testigos (…) observó la existencia de la agresión, con la única excepción de la esposa del denunciante. Ahora bien, la credibilidad de esta testigo debe ponerse en entredicho dada su relación de parentesco con el denunciante y la enemistad manifiesta que mantiene con los denunciados, familiares todos ellos de Isabel». Según la sentencia, los únicos testigos «no implicados de forma personal» serían las empleadas de la cafetería, «que más allá de los reproches e insultos no presenciaron agresión alguna».

Pero el testigo más importante para la juez fue el empleado de la funeraria que trasladó a Luis Lorenzo y su esposa Aránzazu desde el tanatorio hasta el juzgado en su vehículo. Este testigo «negó haber presenciado agresión alguna y señaló que si bien había un clima de tensión entre los implicados, únicamente existieron reproches por el tema de la difunta, que no vio a los denunciados levantarse de la mesa y que finalmente se acercó para decir que «no armaran follón».

El actor Luis Lorenzo también aportó una grabación de audio del incidente que, a juicio de la juez, «nada aporta en cuanto a la existencia de la agresión, las expresiones ‘asesinos’, ‘no tenéis vergüenza’, ‘los asesinos aquí están’ proferidas por los denunciados no son constitutivas de delito alguno al haber sido despenalizadas las injurias leves y exigir querella la calumnia (…)».

Por todo ello, la juez absolvió a la tía de Aránzazu, esposa de su tío, del delito leve de lesiones y a la misma mujer y sus dos hijos, primos de Arancha, del delito leve de coacciones. Las costas del procedimiento fueron declaradas de oficio.