Iglesias hace chantaje con las residencias: se harán mejoras si se aprueban los Presupuestos

El vicepresidente segundo y ministro de Derechos Sociales y Agenda 2030, Pablo Iglesias, ha vinculado las mejoras en las residencias de mayores, uno de los focos críticos de la pandemia de coronavirus, a la aprobación de los Presupuestos Generales.

Iglesias, que comparece en la Comisión de Derechos Sociales del Senado, ha considerado que estos centros «arrastran problemas estructurales desde hace varios años»  y «es necesario emprender medidas de fondo». Sin embargo, ha avisado, habrá que «hacer un importante esfuerzo en los Presupuestos Generales», vinculando así esas mejores a las cuentas del Ejecutivo.

En este contexto, el líder de Podemos ha anunciado que promoverá un programa de acreditación de calidad de las residencias de mayores, además de un plan de choque para «reimpulsar» el sistema público de atención a la dependencia.

Iglesias ha destacado que la referencia para esas medidas es el programa del Gobierno socialcomunista que, ha dicho, establece una base «correcta» para ello.

Contra las privadas

Asimismo, el vicepresidente segundo ha arremetido contra el actual modelo de gestión de los centros, criticando que las residencias de mayores privadas supongan un 75% del total de centros residenciales del país.

«No sé si un modelo tan altamente privatizado como el de las residencias de mayores, con unos niveles de precariedad incomparables entre sus trabajadores es un modelo propio de la cuarta economía de la zona euro», ha opinado.

Así, ha considerado Iglesias que se deben «aprovechar los acuerdos de reconstrucción para que el modelo de residencias cambie en nuestro país y sea un modelo mejor dotado, con trabajadores públicos que cobren salarios decentes».

«Patriotismo fiscal»

Por otro lado, el líder de Podemos ha anunciado también que el Gobierno aprobará «en los próximos días» en el Consejo de Ministros la puesta en marcha del Ingreso Mínimo Vital, una medida anunciada ya hace semanas.

Iglesias ha defendido que ese ingreso «no se va a ir a ninguna cuenta de Suiza ni huir de nuestra patria, sino al consumo, para que los autónomos y empresas puedan seguir facturando».

Ha insistido además en su idea de gravar los patrimonios de más de un millón de euros, una propuesta que no comparte el PSOE. «No creo que les suponga ningún problema un ejercicio de patriotismo fiscal», ha considerado en su comparecencia.