El CGPJ retira los nombramientos pendientes ante la inminente renovación

El Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) ha retirado del pleno de esta semana las últimas cinco plazas de magistrado del Tribunal Supremo que quedaban pendientes ante la inminente renovación del órgano de Gobierno de los jueces. El CGPJ no cubrirá los puestos pese a que parte del consejo se ha mostrado en contra de esta decisión adoptada, de forma unilateral por el presidente del órgano, Carlos Lesmes.

Entre las plazas que no se votarán están las dos de magistrado de la Sala Tercera, correspondientes al turno de juristas de reconocida competencia, que quedaron vacantes tras la jubilación de los magistrados Jorge Rodríguez-Zapata y Javier Borrego. Las otras dos plazas que quedan fuera son de la Sala Primera, de Civil, a las que se presentaron 20 candidatos y donde el magistrado Manuel Almenar es uno de los favoritos para conseguir una de ellas. Por último, queda otro puesto vacante en la Sala IV.

La cantidad de magistrados que se presentaron para sólo dos plazas, y debido a que se necesitan un mínimo de 13 votos para que la elección salga adelante había provocado que los vocales hubieran previsto dos reuniones antes del pleno, pero según ha podido saber OKDIARIO de fuentes de toda solvencia, esas reuniones quedaron aplazadas ante la posibilidad de que Lesmes sacara del pleno los nombramientos, cosa que finalmente ha terminado sucediendo.

Pero no sólo quedan pendientes las plazas del Tribunal Supremo. Los vocales del CGPJ también querían aprobar en el pleno de febrero las presidencias de los tribunales superiores de Canarias y País Vasco, la de la Sala Social del País Vasco y las de las Audiencias Provinciales de Almería y Salamanca, algo que obviamente ya no sucederá.

Plazas en el aire

Aunque los vocales del CGPJ han tratado de apurar todo lo que han podido los tiempos, la realidad política se ha colado en la presunta separación de poderes. Así, no solo quedan pendientes las anteriormente descritas, sino que otras como la Audiencia Provincial de La Rioja, que se convocó el pasado 11 de febrero, o la del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana ni siquiera han sido convocada todavía, dejarán huecos que no se podrán rellenar hasta que se formalice el cambio de consejo.

LOPJ

Mientras los vocales del CGPJ esperan un acuerdo entre PSOE y Podemos, la tramitación de la nueva LOPJ está a un solo paso de ser aprobada pese a que el Gobierno la ha sacado del pleno de esta semana. Hace una semana se aprobaba en la Comisión de Justicia, con 18 votos a favor y 15 en contra y dos abstenciones, la ponencia que avala el texto que se presentará al pleno del Congreso de los Diputados y que impedirá a un consejo en funciones realizar nombramientos. Así, si finalmente cayera el acuerdo, las plazas pendientes no se podrían nombrar, lo que dejaría tanto al Supremo como a otros órganos judiciales cojos de magistrados.

Según las fuentes consultadas, la intención del Gobierno, sobre todo del PSOE, era presentar el texto al Pleno de la última semana de febrero, pero finalmente se ha retrasado una semana para conseguir el acuerdo de renovación con el Partido Popular.

Con el Consejo renovado, y si se hubieran hecho los nombramientos pendientes, no habría problemas más allá de que si alguna de las plazas, cuyos candidatos ya han expuesto sus programas, no hubiera sido nombrada por el actual CGPJ, la carrera debería comenzar desde el principio. Pero con la decisión de Lesmes, todos los nombramientos van por el aire.

Bronca

La modificación de la Ley Orgánica del Poder Judicial ha estado envuelta por la polémica desde su anuncio. La mayoría de los partidos políticos se han mostrado contrarios. Entre los más beligerantes están el Partido Popular, Ciudadanos y Vox.

De hecho durante la Comisión de Justicia, el portavoz de Vox Javier Ortega Smith dijo: “Nos encontramos ante una nueva fase de los partidos de siempre en el control de la Justicia que han hecho siempre, pero como PSOE y Podemos no son quienes tienen la mayoría política en el CGPJ, y los nombramientos no son a su gusto y no pueden colocar a los suyos” cambian la ley. “Esto es lo que subyace en esta propuesta. Cuando hablan de limitar lleva consigo eso, sólo eso. Nunca se ha planteado antes porque siempre han sabido colocar a los suyos pactando… el reparto de los cargos de la Justicia”.

Los que también han mostrado su rechazo frontal al cambio son todas las asociaciones de jueces y magistrados, así como los vocales del CGPJ que han intentado, hasta en dos ocasiones, que el Congreso de los Diputados les deje informar sobre la ley. Encontrándose las dos veces con el rechazo de la Mesa de la Cámara Baja, controlada por PSOE y Podemos.