El ‘profeta’ Artur Mas en 2015: «No se marchará ningún banco en una Cataluña independiente»

El ex presidente de la Generalitat, Artur Mas, aseguró en un acto de campaña electoral en 2015 que los bancos catalanes no se irían en caso de que Cataluña se independizase finalmente. «Calma, tranquilidad, no se marchará ninguno», afirma el ex líder del ejecutivo catalán.

Mas acusaba al Gobierno central de Mariano Rajoy de infundir «miedo» a los catalanes «diciendo que los bancos se irán» si la Generalitat consumaba la secesión de Cataluña del resto de España.

«Tanto miedo, tanto miedo, tanto miedo… y resulta que al final nos acaban diciendo que los bancos se irán. Calma, tranquilidad, no se marchará ninguno. ¿Me entendéis?», destacaba el ex presidente del Govern.

Los hechos ocurrieron durante un acto de campaña de Junts pel Sí de cara a las elecciones catalanes de 2015. ERC y la antigua CDC decidieron acudir a estos comicios en unas listas conjuntas para su desafío independentista al Gobierno central.

«¿Os pensáis que se irán de aquí? Claro que no se irán de aquí, se quedarán, que no son todos ellos ni las hijas de la caridad ni las hermanitas de los pobres», recalcaba Mas durante este evento.

Para finalizar su intervención, el actual presidente del PDeCAT reiteraba que «no os preocupéis, que ya no nos lo creemos. Que ya somos un poco mayorcitos».

Sus palabras no se están cumpliendo

Sin embargo, estas palabras no se están cumpliendo, puesto que dos entidades financieras catalanas importantes han anunciado que trasladarán su sede fuera de Cataluña: Banco Sabadell y Caixabank.

El Consejo de Administración de Banco Sabadell acordó en una sesión extraordinaria el traslado de su sede social a Alicante. El motivo principal era la posibilidad de que en los próximos días el Parlamento de Cataluña apruebe una Declaración Unilateral de Independencia (DUI).

Caixabank comunicó este jueves a sus clientes que no cierran la puerta a mudarse de Cataluña con un hipotético destino a Baleares. La compañía manifestaba en un comunicado interno remitido a sus empleados que «Caixabank guiará sus decisiones futuras, que en caso de ser necesario, hayan de tomarse».

«La compañía protegerá los intereses de sus clientes, accionistas y empleados, garantizando la integridad de los depósitos», añadían en esta nota interna.