para esquivar las sanciones

Volkswagen paraliza su producción y detiene sus ventas en Rusia

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Andrea Aguado
  • Andrea Aguado
  • Redactora de economía y coordinadora de OKMOTOR. Amante de las cuatro ruedas y la industria. Antes en informativos de Radio Televisión Castilla y León.

El Grupo Volkswagen ha puesto fin a toda la producción y las ventas en Rusia con efecto inmediato por el conflicto bélico en Ucrania. El fabricante automovilístico alemán dejará de fabricar vehículos en sus plantas de Kaluga y Nizhny Novgorod hasta nuevo aviso, además de detener todas las exportaciones al país.

Tanto la planta de Kaluga donde el fabricante local GAZ construye el Volkwagen Polo, Volkswagen Tiguan y Skoda Rapid bajo licencia, además de ensamblar el Audi Q7 y el Audi Q8 a partir de kits desmontables y construir motores de gasolina para varios modelos, como la planta de Nizhny Novgorod fabrica el Volkwagen Taos y tres modelos Skoda están paralizadas.

La compañía ha señalado que «se toma muy en serio su responsabilidad por los empleados afectados en Rusia» y les pagará beneficios laborales de ‘tiempo reducido’.

Una decisión que tendrá un impacto directo en Skoda, en particular, que vendió 90.000 automóviles en Rusia el año pasado, convirtiéndolo en el segundo mercado global más grande de la marca checa.

La medida pone al Grupo VW en línea con varios otros fabricantes globales que ya han detenido sus operaciones rusas y empresas conjuntas en los últimos días, en línea con las severas sanciones comerciales impuestas a Rusia después de que el presidente Vladímir Putin ordenó la entrada de tropas en Ucrania.

Otros fabricantes

Aston Martin, BMW, Ford, General Motors, Honda y Jaguar Land Rover se encuentran entre las empresas que detuvieron las ventas en las regiones, mientras que otras se vieron obligadas a dejar inactivas las instalaciones de producción global como resultado del impacto del conflicto en sus cadenas de suministro.

Este miércoles Volkswagen anunció que detendría la producción en sus instalaciones de Zwickau y Dresden hasta el viernes, lo que afectaría las entregas de sus vehículos eléctricos basados ​​en MEB, y donará 1 millón de euros (829 000 libras esterlinas) a la organización benéfica para refugiados UNO-Flüchtlingshilfe.

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