La realidad que tapa el Gobierno: cinco años en salir de la crisis y otro frenazo a finales de año

El Gobierno de Pedro Sánchez está lanzando mensajes optimistas sobre el futuro de la economía española. Aunque ya ha filtrado en domingo que empeorará su cuadro macroeconómico en el Consejo de Ministros de este martes o de la semana próxima -para atemperar el golpe en la opinión pública del agravamiento del cuadro macro-, lo cierto es que tanto el presidente como sus ministros han asegurado que España está ya en recuperación y que está dejando atrás la crisis.

Pero la realidad no es tan positiva como la pintan. Para empezar, un informe de la Airef, un organismo dependiente del propio Estado, sobre el futuro de las pensiones evalúa cómo será el futuro de la economía e indica lo siguiente: «En el horizonte de medio plazo, la hipótesis fundamental es que la brecha de producción que se abrió por la crisis de la covid-19 se cierra progresivamente hasta anularse en el año 2025».

Este organismo estatal indica, no obstante, que «cinco años de transición son un período de tiempo notablemente inferior al que se requirió para cerrarla brecha abierta tras la crisis financiera de 2008-09». Y que el escenario central supone que la crisis del covid-19 tiene «naturaleza transitoria», de manera que el crecimiento del PIB potencial mantendría su trayectoria, creciendo en 2020 y 2021 a un ritmo similar al de los años previos, un 1,6%». Aunque ese es el escenario central, sin contemplar posibles agravamientos de la pandemia y de su impacto en la economía.

«En 2020 se estima que la brecha de producción se amplía de manera extraordinaria, hasta un-12,6% del PIB potencial, reflejo del período de hibernación en que fue necesario sumir a la economía y de la posterior persistencia de medidas de distanciamiento social. Posteriormente esta brecha se reduce de manera progresiva hasta desaparecer en 2025. Por su parte, el crecimiento del PIB real converge al PIB potencial en ese mismo período manteniendo desde 2025 un comportamiento idéntico», remacha la Airef.

Nuevo frenazo económico

Pero por otro lado está la situación a corto plazo. Y un informe de Axesor, la agencia de ráting española que ha rebajado este lunes la calificación crediticia del país por la incertidumbre del coronavirus, advierte que habrá una desaceleración económica a finales de año: «Alertamos sobre las incertidumbres que giran en torno a la evolución de la pandemia durante el cuarto trimestre y las consecuencias que pudiera tener sobre el crecimiento proyectado para el próximo año y por consiguiente en las finanzas públicas».

«Aunque esperamos que los efectos de la reactivación de actividad observada en el mes de junio ‐una vez puesto fin a las medidas de confinamiento‐ se hayan extendido hacia el tercer trimestre del año, el hecho de que la recuperación de la actividad turística (responsable del 14% del PIB) se haya situado por debajo de nuestras expectativas en un trimestre de especial importancia para esta rama de actividad creemos que presionará negativamente sobre la capacidad de crecimiento de este periodo del año ‐que girará en torno a una tasa intertrimestral del 13,7%‐, con un cuarto trimestre en el que esperamos que los repuntes de contagios recuperen cierto protagonismo y limiten la capacidad de crecimiento económico hasta el 2,9% intertrimestral, todo ello suponiendo la ausencia de nuevos confinamientos generales de la población y ante un escenario económico dominado por la incertidumbre», señala esta agencia de ráting.

Es decir, que tras el rebote automático del tercer trimestre vendrá, de nuevo, una desaceleración que podría ser más graves en el caso de que se repitan los confinamientos generales de la población -que no ha descartado completamente el Gobierno- o de que surjan nuevas incertidumbres.