La patronal Anesco acepta subrogar estibadores si se recortan antes plantillas y sueldos

Algeciras
Puerto de Algeciras (Foto. Getty)

La patronal de la estiba Anesco acepta subrogar al colectivo de estibadores de los puertos, la que constituye principal reivindicación de los sindicatos del gremio, si bien la condiciona a que previamente se pacte un ajuste de la plantilla de este colectivo y una bajada del 10% en sus sueldos.

Así consta en la propuesta que las empresas han remitido a los sindicatos del gremio (Coordinadora de Trabajadores del Mar, UGT, CC.OO., CIG y CGT) en el marco de la negociación del nuevo convenio tras la reforma del sector aprobada por el Gobierno en mayo para liberalizarlo y que cumpla con la normativa de la UE.

Anesco considera que su propuesta incluye los mismos puntos que la planteada por los sindicatos la pasada semana, salvo aquellos que se consideraron ilegales.

Se trata de la petición sindical de que las empresas se comprometan a participar en los centros portuarios de empleo, las ETT’s en que se pueden convertir las sociedades de gestión de estibadores portuarios (sagep), las firmas de las que ahora depende este colectivo.

El documento de la patronal tampoco recoge la pretensión de los estibadores de participar en el proceso de selección y acceso de nuevos trabajadores a la profesión.

El cruce de propuestas entre patronal y sindicatos de la estiba tiene lugar mientras los sindicatos del sector secundan desde hace quince días un calendario de distintas jornadas de paros en los puertos, que aún tiene programadas nuevas huelgas para mañana miércoles y el viernes, y para las dos semanas siguientes.

Subrogación condicionada

En concreto, la propuesta que Anesco ha remitido a los sindicatos plantea incluir en el nuevo convenio una cláusula que «garantice» la subrogación de los estibadores que formaran parte de las sageps antes de la reforma del sector aprobada por el Gobierno.

Dicha cláusula indicaría que «en el caso de que una empresa decida salir de la sagep, sin que su participación sea sustituida por la de otra empresa», los trabajadores que tuviesen contrato con la sagep «tendrán derecho a su incorporación voluntaria en la empresa, en la proporción que le corresponda en función de la participación de la firma en la sagep y con las misas condiciones labores y colectivas».

La subrogación se regirá según lo fijado en el artículo 44 del Estatuto de los Trabajadores, legislación a la que los sindicatos venían apelando para defender su reivindicación.

No obstante, Anesco indica que esta cláusula de subrogación «sólo tendrá efectos» tras concretarse tres propuestas que plantea previamente. Se trata de abordar mejoras operativas en los puertos, pactar las prejubilaciones y acordar una bajada de sueldo.

Prejubilaciones y bajada de sueldo

Así, la patronal indica que «el avance en la negociación requiere la definición, puerto a puerto, de un plan de prejubilaciones», para que el Gobierno ya ha comprometido ayudas de 120 millones de euros, y pactar otras «medidas extintivas» en caso de que sigan existiendo excedentes de personal.

En paralelo, plantea bajar un 10% el sueldo de todos los estibadores que ganen más de 2.230 euros (el resultante de multiplicar por tres el salario mínimo actualmente de 707,60 euros al mes y un 5% más) lo que, según la patronal, abarca a casi todo el colectivo. Según el sector, el suelo de los estibadores constituye el 60% del coste total de la estiba.

La tercera condición que las empresas ponen para subrogar a los estibadores es definir «puerto por puerto» mejoras operativas, en cuanto a organización del trabajo, para mejorar la competitividad.

Calendario

Además de fijar sus propuestas, la patronal fija un calendario para tratarlas, que arrancaría en los próximos días, con el fin de poder tener perfilado el nuevo convenio del sector para comienzos de octubre.

Asimismo, plantea que las dos partes se comprometan a garantizar un marco de estabilidad para poder abordar este calendario de negociación.

Así, llama de nuevo a la «reflexión» a los sindicatos para que desconvoquen las huelgas anunciadas, dado el «grave daño» que están generando al sector y a la economía. De su lado, se compromete a «recomendar» a las empresas asociadas a «no realizar modificación alguna en su funcionamiento» mientras dure la negociación.

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