El exdirector de Supervisión del BdE afirma que advirtió a Bancaja de su situación y «no hizo caso»

Tello, que fue director general de Supervisión del Banco de España desde abril de 2009 hasta octubre de 2012, ha relatado ante la sección cuarta de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional que antes del proceso de integración que dio lugar a Bankia el regulador llevó a cabo una inspección a Bancaja, y vieron «que no iba a superar el proceso de crisis».

Se encontraron con dos debilidades: por un lado, la estructura financiera, que hace referencia a las dificultades para financiarse en los mercados mayoristas; y, por otro, un 24% de riesgo promotor.

Representantes del Banco de España se reunieron en diversas ocasiones con el presidente de la entidad, José Luis Olivas, para instarle a buscar una solución.

«No iban a poder con la crisis»

Tanto el gobernador del Banco de España -Miguel Ángel Fernández Ordóñez- como el subgobernador -Javier Aríztegui- y el propio Martínez Tello se reunieron con Olivas para advertirle de la delicada situación de la entidad, pero no les hicieron «caso»; posteriormente, el presidente de Bancaja llegó a un acuerdo con el de Caja Madrid, Rodrigo Rato.

Tello ha querido dejar claro que el Banco de España «recomendaba», partiendo de un análisis que mostraba que «no iban a poder con la crisis», pero la decisión estaba en manos de los gestores de las entidades.

El SIP o «fusión fría» que dio lugar a Bankia lo formaron Caja Madrid, Bancaja, La Caja de Canarias, Caja de Ávila, Caixa Laietana, Caja Segovia y Caja Rioja, aunque la entidad madrileña tuvo algún «escarceo» anterior, uno con Caja Galicia y la Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM), «que se fue al traste», con Caixa Layetana y Penedés, y algún proyecto con la CECA, ha explicado Martínez Tello