Elena Sánchez humillada en el consejo de RTVE: vota sola su propuesta de despedir a altos cargos

La presidenta interina de Radio Televisión Española (RTVE), Elena Sánchez, que alcanzó el cargo en septiembre después de que Moncloa forzara la dimisión del anterior responsable, José Manuel Pérez Tornero, ha recibido el mayor rapapolvo que se recuerda en la cadena pública. En el último consejo de administración de RTVE, en marzo -este jueves se celebra el de abril en Barcelona-, Sánchez se quedó sola votando a favor de despedir a altos cargos de la cadena por el caso del gasto descontrolado en dietas, destapado por Hacienda.

Según explican fuentes cercanas al consejo de la cadena pública, la propuesta estaba incluida en el orden del día de la reunión y fue defendida por el consejero José Manuel Martín Medem, de Podemos. En realidad, destacan las fuentes, era una propuesta de la propia presidenta. Cuando llegó el momento de votar, los tres consejeros del PP, Jenaro Castro, Carmen Sastre y Consuelo Aparicio, votaron en contra. A ellos se unieron los dos consejeros con los que contaba el PSOE para controlar RTVE y que han salido rebeldes: Ramon Colom (PSOE), y Juanjo Baños (PNV).

Cinco votos en contra que ya tumbaban la petición de Sánchez. Pero, además, la otra consejera del PSOE, Concepción Cascajosa, se abstuvo en la votación y los dos consejeros de Podemos decidieron hacer lo mismo, Roberto Lakidain y el propio Medem. «Medem vio que perdía la votación y aunque en teoría era el que hacía la propuesta, votó abstención. Eso demuestra que la propuesta era de Elena Sánchez», aseguran fuentes cercanas al consejo.

La votación muestra la soledad de la presidenta interina de la Corporación, que deja la cadena pública en una situación de parálisis en su gestión. Desde que accedió al cargo, no ha tenido el apoyo del consejo para hacer los cambios en la estructura de la cadena que ella misma anunció en su primera comparecencia en el Congreso como presidenta interina. Cambios que anunció inminente.

La realidad es que Elena Sánchez, que ha pedido ayuda a Moncloa para conseguir el control del consejo, recibe el apoyo de Colom y Baños sólo para las cuestiones de programación, pero no para cambiar a los altos cargos, nombrados por el anterior presidente, Pérez Tornero.

Despidos

Porque despedir al número dos de la cúpula de la cadena, Alfonso Morales, es un deseo desde hace meses que Elena Sánchez no puede ejecutar. Le ha pedido ya varias veces que dimita y éste se ha negado. Tampoco a José Luis Muñiz, director de Programación y Medios.

Ante la imposibilidad de despedirlos al no tener la mayoría en el consejo para ello, Sánchez ha aprovechado un informe de Hacienda que desvela supuestas irregularidades en el cobro de dietas de algunos de estos directivos para justificar su cese. Sin embargo, ni siquiera así ha podido hacerlo y en el consejo de marzo recibió un varapalo histórico: 5 votos en contra, 3 abstenciones y sólo un voto a favor, el suyo.